El Gobierno venezolano reconoce exceso policial en la muerte de la hija del consul chileno

Fernando pensó que el retén policial improvisado en la zona era una emboscada como le había ocurrido recientemente cuando tuvo que enfrentarse a unos delincuentes que le querían robar el coche, marca Chevrolet Trail Blazer. El hijo del cónsul chileno aceleró su coche pensando que le querían atracar como la semana anterior.

Sin embargo, los uniformados del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Policiales y Criminalísticas, CICPC, dispararon una ráfaga con sus fusiles automáticos al coche que no se detuvo, matando a la muchacha Karen. La joven recibió tres de los seis disparos de la policía contra la camioneta que le segaron la vida.

Su cuerpo se desvaneció mortalmente. El hermano Fernando llevará ese trauma por largo tiempo por no haber parado ante el alerta policial. Hay doce agentes policiales del CICPC involucrados en el caso. Se hará justicia. El gobierno venezolano ha reconocido el abuso de la policía en el tratamiento del caso, que ya es mucho.

Karen Berendique era estudiante de comunicación social y es la novena víctima de la violencia del cuerpo diplomático en los últimos años que incluye asesinatos, atracos, secuestros y robos en países como Bolivia, Arabia Saudita, (2) Mexico, Reino Unido, Países Bajos, Vietnam, Grecia y (3) Chile.

“ La inseguridad está matando a los venezolanos y no veo que se haga nada que valga la pena”, dijo entre lágrimas con el féretro de su hija, Fernando Berendique, que dirige el Consulado de Chile en Maracaibo, estado Zulia.

Hay malestar en la relación entre Chile y Venezuela. El organismo rector de la policía venezolana responde con la detención con seis de los doce funcionarios por supuesto abuso de autoridades. Pero quien responde por la muerte de Karen Vanessa o el caso quedará impune como la mayoría de éstos en el país.

En Venezuela se registraron más de 19.000 homicidios el año pasado. 2011 fue un año fatídico y récord en cifras sangrientas en los últimos 13 años, que ya suma más de 130.000 asesinatos. En contraste con 1999, fecha cuando asumió Chávez, la cifra fue de 4.500 homicidios.