Los Bundeslander exigen a Merkel «soluciones individuales» para relajar las restricciones

La ministra de Sanidad de Baviera y médico titulado, Melanie Huml, ha declarado que su región está «lista para un enfoque conjunto». «Habría áreas donde tenemos que hacerlo juntos, es necesario un cierto grado de unidad», pero a renglón seguido sugería una posible ruta especial bávara: «pero también puede haber calendarios diferentes de aperturas comerciales y regulaciones de los estados federales, donde podrían darse diferentes enfoques». «Creo que mañana (miércoles) se debatirá mucho sobre eso, y tendremos otra reunión del gabinete el jueves, donde decidiremos las medidas para Baviera».

Merkel mantendrá mañana (miércoles) una vídeoconferencia con los presidentes de los Bundeslander en la que tanteará un protocolo conjunto de salida de las restricciones y a la que los presidentes regionales conectarán desde diferentes expectativas, dadas las diferentes situaciones sanitarias en sus territorios. Armin Laschet, que preside Renania del Norte Westfalia, el más poblado de los estados federados alemanes, ha defendido el establecimiento de un protocolo común pero con flexibilidad en los acuerdos de base para que cada gobierno regional vaya tomando sus decisiones. Es el que más aprisa desea abandonar las restricciones. «Al final, se trata de encontrar un equilibrio correcto entre la protección de la salud, la vida pública y la economía», ha asentido el Spahn.

Si bien todos están de acuerdo en que la industria y el comercio deben seguir un proceso de reapertura gradual, por el momento no hay manera de que acuerden un regreso simultáneo de los escolares a los colegios. El presidente de Baden-Württemberg, por ejemplo, quiere abrir los centros educativos a partir del 27 de abril , al igual que el alcalde de la ciudad- estado de Berlín, que fija la fecha en 27 de abril o principios de mayo. El de Westfalia Norte quiere sin embargo cumplir con el calendario escolar prestablecido y arrancar con las clases el 20 de abril. El de Turingia ha pedido una normativa federal sobre usos y costumbres que debería seguir en vigor a largo plazo, incluso después de haber superado la pandemia, y que erradicarían saludos como darse la mano. Y por encima de todos ellos está el criterio del Instituto Roland Koch (RKI), que ha advertido al gobierno que «es pronto para relajar las medidas».

El presidente del RKI, Lothar Wieler, califica de «buena noticia» que las medidas restrictiva adoptadas por el gobierno federal y los estados federados estén surtiendo efecto y dio las gracias a los ciudadanos por respetarlas, Pero ha dejado caer un jarro de agua fría sobre las expectativas de relajación que habían generado la prensa alemana ante la videoconferencia de Merkel y los presidente regionales. «Recompensémonos y mantengamos las medidas de comportamiento, así como la disciplina que hemos mostrado en las últimas semanas. De esta manera, la recompensa será tanto más grande después», ha dicho.

Las cifras de nuevos contagios ya no crecen tanto desde hace varios días, pero Wieler advierte que « se han estabilizado a un nivel relativamente alto , por lo que, aunque se observa una ralentización, a día de hoy todavía no es posible hablar de una contención de la pandemia». El número de infecciones asecendió en las últimas 24 horas en 2.082, hasta las 125.098 , mientras que la cifra de muertes se sitúan en 2.969, lo que supone 170 en un día y un 2,4% respecto a todos los casos de contagio registrados oficialmente. No obstante, es posible que debido a los festivos se hayan comunicado menos casos y se hayan realizado menos test. Con estos datos sobre la mesa , la incidencia a nivel federal se sitúa en 150 contagios por cada 100.000 habitantes, con claras diferencias regionales, y el factor Ro, el número básico de reproducción que mide el promedio de nuevos contagios causados por un solo individuo afectado en promedio, en 1,2. Para poder decir que la pandemia está remitiendo, el Robert Koch exige que ese factor sea inferior a 1.

«68.100 contagiados constan ya como recuperados, es decir, más de la mitad de los infectados. Eso quiere decir que estamos en el buen camino», ha dicho Wieler, pero no hay que relajarse al menos hasta que los casos de congio por día no superen un número determinado durante al menos una semana seguida. «Ninguno de nosotros debería tener la ilusión de que la próxima semana recuperaremos nuestra vieja vida», ha zanjado el presidente de Baja Sajonia, Stephan Weil. El gobierno federal debatirá mañana concretamente sobre la reapertura de los colegios y se espera, por tanto, que «el acuerdo a nivel federal permita cierta flexibilidad porque no todos afrontamos la misma situación».