A lo bonzo en el norte de África

Yaghoub Uld Dahud, un empresario mauritano y padre de tres hijos, roció con gasolina su coche y le prendió fuego antes de encerrarse dentro y bloquear los cerrojos frente al Senado mauritano. Un inspector de policía que se hallaba en las inmediaciones consiguió romper la ventanilla de una de las puertas traseras del vehículo para sacar al hombre y apagar las llamas con ayuda de otros viandantes, según relataron testigos a Efe. Dahud fue trasladado al Hospital Militar de Nuakchot y, pese a las quemaduras, su vida no corre peligro, señalaron fuentes hospitalarias.

Horas antes el propietario de un restaurante de la provincia de Ismailiya se ha quemado frente al Parlamento de Egipto, en el centro de El Cairo, en protesta por el cierre de su establecimiento. El hombre se roció con gasolina y se prendió fuego después de que le impidieran entrar en el Parlamento para exponer su problema. Ha sido hospitalizado en estado grave. Según la versión on line del diario egipcio Al Masri al Yom , que cita testigos y fuentes policiales, el ciudadano se llama Abdo Abdelmanam Yafar, tiene 49 años y antes de quemarse gritó: «Seguridad del Estado, seguridad del Estado, mi derecho se ha perdido en el Estado».

Argelia ha vivido estos días una ola de autoinmolaciones, con una de ellas mortal, según la prensa argelina. Un desempleado de 34 años de edad, llamado Senuci Tuat, se derramó gasolina y se prendió fuego ayer domingo delante de la sede de las fuerzas de seguridad en la provincia de Mostaganem, a 350 kilómetros de Argel. El hombre se encuentra herido aunque su vida no corre peligro, según medios locales. Peor suerte tuvo el padre de familia en paro de 37 años Mohsen Bouterfif que falleció tres días después de prenderse fuego en la localidad de Bujandra, en la provincia de Tebessa fronteriza con Túnez.

Bouterfif participaba en una protesta de unos veinte jóvenes que se habían congregado frente a la alcaldía reclamando un empleo y un alojamiento. El hombre se prendió fuego después de que el alcalde no quisiera atender sus reclamaciones y en denuncia por «la actitud de desprecio que le mostraron», según vecinos de Bujandra.

Asimismo, un hombre de 26 años, Auichia Mohamed, se prendió fuego el miércoles en la localidad de Bordj Menail, en el vilayato de Bumerdés , y otra persona se quemó a lo bonzo en la localidad de Jijel, capital de esta provincia homónima del norte de Argelia.

La extensión de esta práctica, poco común en países islámicos, unida a las revueltas de las pasadas semanas en Argelia y Jordania, donde se dan los ingredientes de miseria de la revuelta tunecina, llevan a pensar en un posible efecto dominó tras el derrocamiento de Ben Alí.

Fuentes oficiales argelinas han indicado que al menos dos personas han muerto y numerosas han resultado heridas en los disturbios registrados esta última semana en varios puntos de Argelia. El Gobierno ha reducido los precios del azúcar y del aceite de cocina para intentar calmar la situación.