La figura de Assad divide la cumbre árabe

Las grandes potencias de la Liga como Qatar y Arabia Saudí han apostado desde el comienzo por el aislamiento del régimen de Damasco y han exigido la salida del poder de Al Assad como primer paso hacia la paz, otros socios como Argelia o Irak , anfitrión de la cumbre, son más cautos y abogan por una «solución siria», un cambio liderado por el propio mandatario para ahuyentar los fantasmas de una guerra sectaria que podría provocar el vacío de poder.

Mientras la figura de Al Assad se erige como el principal punto de discusión de una agenda que concluirá a última hora del sábado, la insurgencia dio su particular bienvenida a los participantes de esta XXIII cumbre árabe con el lanzamiento de un cohete que impactó cerca de la embajada de Irán, a las puertas de la Zona Verde donde se desarrolla el encuentro.

Detrás de los muros de cemento de esta zona creada por los estadounidenses durante la ocupación para establecer su centro de operaciones se discute ahora el futuro de Siria. El régimen de Damasco es el gran protagonista y el gran ausente a la vez porque la Liga le apartó del organismo el pasado noviembre como medida de castigo por la represión contra las protestas populares. Por ello el régimen de Al Assad ha insistido en las últimas horas en que no aceptará ninguna resolución y que solo negociará con los países miembros de forma bilateral.

Tras meses de medidas punitivas, resoluciones internacionales estériles y el envío de una misión de observadores que no sirvió para detener la violencia, la Liga Árabe parece dispuesta a dar una oportunidad al proyecto de Annan . En la atomizada oposición siria no ven con mucha esperanza esta nueva vía que para el secretario general de la ONU supone «un importante paso que podría poner fin a la violencia y al derramamiento de sangre».

Ban Ki-moon viajó a Bagdad para reunirse con los dirigentes árabes y mostrar todo su respaldo a un plan que para que funcione precisa que Al Assad cumpla sus compromisos «con efecto inmediato». Pese al visto bueno de Damasco al plan conjunto de la Liga Árabe y de la ONU, al menos otras trece personas perdieron la vida en Siria en la guerra abierta entre el Ejército y las milicias opositoras. Los pasos esenciales que Annan ha puesto sobre la mesa son el fin «inmediato» de la violencia , la protección de civiles y las garantías para que los ciudadanos puedan manifestarse libremente.

La protección de Rusia y China ante la ONU ha logrado blindar al régimen de Damasco que con el paso de los días ha sometido por la fuerza a los bastiones rebeldes en todo el país. Una guerra de baja intensidad, usando armas pesadas, pero no aviación , que ha llevado la situación a una especie de estancamiento que trata de romper Annan.

Tras visitar Damasco viajó a Moscú y Pekín y la próxima semana se trasladará a Teherán, capital de la gran potencia regional y mejor aliada de Al Assad. Irán también pasa por aprietos debido a los rigores de las sanciones internacionales contra su programa nuclear y, con la mirada puesta en la nueva ronda negociadora del 13 de abril, algunos analistas opinan que todas las opciones están sobre la mesa y que podrían relajar su apoyo a cambio de una rebaja en la presión externa.