La Asamblea de Venezuela celebra su sesión pese al cerco militar de Maduro

El martes fue suspendida la sesión después de que, con el pretexto de la amenaza de un supuesto artefacto explosivo, los cuerpos de seguridad bloquearon la sede de la Asamblea e impidieron la actividad de los legisladores.

La sesión se celebró finalmente este miércoles y la agenda del debate incluyó la desaparición del primer vicepresidente de la Asamblea Nacional, Edgar Zambrano , y la persecución a los diputados en conjunto, la destrucción del poder adquisitivo y el salario, y la reincorporación del país a la Convención Interamericana de los Derechos Humanos.

Con un quorum de 87 diputados, incluidos los 14 suplentes de los sancionados, Guaidó advirtió de que «no van a lograr» bloquear el poder legislativo. «No hay nada ni nadie que nos haga desistir de la responsabilidad que tenemos con el país», aseguró. «Aquí estamos sesionando. ¿Qué logró la dictadura ayer con la toma del palacio federal legislativo? Lo que demostraron es que son una vulgar dictadura, que por cierto hemos venido denunciando desde hace tiempo», insistió.

Horas antes, a última hora del martes, la ilegítima Asamblea Nacional Constituyente (ANC) atendió, como era previsible, la solicitud del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) chavista de retirar la inmunidad a otros cuatro diputados, por lo que ya asciende a 14 el número total de legisladores a los que se ha despojado de tal prerrogativa.

El TSJ a las órdenes de Nicolás Maduro imputa a estos cuatro parlamentarios opositores ocho presuntos delitos , entre ellos el de traición a la patria, por el movimiento cívico militar del pasado 30 de abril en el que fue liberado el fundador de Voluntad Popular, Leopoldo López, y el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, llamó a levantarse contra el régimen.

La sentencia contra los diputados Carlos Paparoni, Miguel Pizarro, Franco Casella y Winston Flores fue anunciada el martes mientras Guaidó ofrecía una rueda de prensa y después de que las fuerzas de seguridad tomaran la sede de la Asamblea Nacional e impidieran que se celebrara en ella la sesión prevista.

En el caso de Franco Casella, buscó protección y resguardo en la Embajada de México, cuyo presidente, Andrés Manuel López Obrador, es uno de los mandatarios de América Latina que más próximo a Maduro se ha mostrado desde que Juan Guaidó asumió la presidencia interina del país y emprendió la ofensiva contra la «usurpación».

El TSJ chavista inculpó a esos cuatro diputados por «la comisión flagrante de los delitos de traición a la patria, conspiración, instigación a la insurrección, rebelión civil, concierto para delinquir, usurpación de funciones, instigación pública a la desobediencia de las leyes y el odio continuada».

Acto seguido, el Supremo ilegítimo remitió el caso de los parlamentarios afectados a la ANC para que procediera a revocarles la inmunidad parlamentaria y puedan ser juzgados.

Los otros diez diputados que han sido imputados por esos ocho presuntos delitos son el primer vicepresidente de la Asamblea, Edgar Zambrano; el expresidente de la propia AN Henry Ramos Allup, Richard Blanco, Simón Calzadilla, Américo De Grazia, Luis Germán Florido, Mariela Magallanes López, Juan Andrés Mejía, Sergio Vergara y Freddy Superlano.