La alemana Von der Leyen lanza el «pacto verde» en la UE

A diferencia del ambiente que se vivía hace cinco años en la investidura de la Comisión presidida por Jean-Claude Juncker, que este presentó como «la de la última oportunidad», la alemana ha logrado un apoyo superior y más sólido de lo esperado, para un programa ambicioso que pretende transformar a Europa, sin complejos, en materia de gestión de la energía y el medio ambiente, la tecnología digital y la emigración.

La Comisión Von der Leyen cuenta con 26 comisarios , entre los que hay un número récord de 12 mujeres , procedentes de los tres principales grupos políticos, el Popular (el único que ha cumplido con el objetivo de garantizar la paridad entre hombres y mujeres), el socialista y el antiguo bloque liberal que ahora se llama «Renovar Europa». A pesar de que legalmente todavía forma parte de la Unión Europea, el Reino Unido no ha enviado ningún candidato a comisario, por lo que esta Comisión se inicia con un miembro de menos, lo que puede considerarse como el primer paso efectivo del Brexit, que si las elecciones del día 12 no lo remedian se producirá el 31 de enero.

Puesto que la designación de un candidato a comisario es obligatoria, la primera decisión que ha de gestionar esta Comisión es la de tramitar un procedimiento sancionador contra Londres, con lo que se descartan las posibles dudas sobre la legitimidad del Colegio de Comisarios.

«Mi mensaje es simple: comencemos a trabajar», dijo Von der Leyen, cuyo mandato comienza el 1 de diciembre. La primera reunión del ejecutivo comunitario será el miércoles 4. Antes, el primer viaje oficial de Von der Leyen será a Madrid, para participar en la Cumbre del Clima de la ONU con un breve discurso en el que expondrá sus ambiciones en este campo.

Precisamente, la ex ministra de Defensa alemana ha centrado su programa para los cinco próximos años en el «Acuerdo verde» («Green deal») que prometió poner en marcha tan pronto comience su mandato. «No tenemos tiempo que perder, el mundo necesita nuestro liderazgo» en algo que «es una cuestión existencial para Europa y el mundo». También prometió que hará un esfuerzo para «dominar las tecnología s clave para el futuro» uniendo sus esfuerzos frente a las industrias norteamericanas y chinas. También ha prometido dedicar una parte importante del potencial de la Comisión Europea a fomentar la investigación sobre la curación del cáncer, un tema que le resulta especialmente sensible puesto que cuando vivió de niña en Bruselas perdió a su hermana de 11 años a causa de esta enfermedad.

En el campo de la defensa europea, Von der Leyen insistió en que la UE no será nunca una alianza militar ni un sustituto de la OTAN, pero se comprometió a que al término de la actual legislatura la Unión «se dote de las estructuras y los procedimientos para intervenir cuando sea necesario». La antigua ministra de Defensa alemana también ha prometido movilizar el Fondo Europeo de la Defensa para financiar proyecto de desarrollo tecnológico en los que participen varios países.

Para todo este programa tan ambicioso, Von der Leyen va a necesitar un presupuesto que se corresponda, pero por ahora lo único que tiene es la certeza de que va a ser muy difícil lograr siquiera mantener el actual. La salida del Reino Unido, un país contribuyente neto, deja un agujero de unos 30.000 millones anuales, que ahora se van a repartir entre los países más ricos, Alemania entre ellos, lo que explica que la tendencia sea la de reducirlo sensiblemente, más que la de ampliarlo como espera la presidenta.