Abbas acusa a Israel de llevar a cabo «holocaustos»

Un periodista había preguntado a Abbas si, como presidente, quería disculparse con Israel y Alemania en nombre de los palestinos por el ataque de los asesinos palestinos contra el equipo israelí en los Juegos Olímpicos de 1972 en Múnich y si ayudaría con la investigación. Once israelíes, un policía alemán y cinco de los atacantes murieron en el ataque.

Abbas respondió que quiere encontrar la paz y mirar «hacia adelante». Y añadió: «Si queremos profundizar más en el pasado, sí, por favor, tengo 50 masacres cometidas por Israel. Que también han quedado registradas en documentales (...). 50 masacres - 50 holocaustos, y hasta el día de hoy todos los días tenemos muertos asesinados por las Fuerzas de Defensa de Israel, por el ejército israelí».

Scholz siguió las declaraciones con una expresión petrificada, visiblemente molesto, hizo incluso ademán de intervenir, pero su portavoz Steffen Hebestreit dio por terminada la conferencia de prensa inmediatamente después de la respuesta de Abbas, dado que la pregunta al presidente palestino había sido anunciada previamente como la última. Hebestreit informó más tarde que Scholz estaba indignado por la declaración de Abbas.

«Especialmente para nosotros los alemanes, cualquier relativización del Holocausto es insoportable e inaceptable», dijo en una apresurada entrevista con Bild Zeitung, en la que criticó la acusación del Holocausto y condenó cualquier intento de negar los crímenes. El líder de la conservadora CDU, Friedrich Merz, se ha escandalizado por el manejo del incidente por parte de Scholz en Twitter como «incomprensible». El canciller «¡debería haber contradicho al presidente palestino en términos claros y pedirle que abandonara la casa!», ha escrito.

Su predecesor, Armin Laschet, calificó la aparición de Abbas como «la peor metedura de pata que jamás se haya escuchado en la Cancillería». El Comité Internacional de Auschwitz ha condenado tajantemente la acusación de Holocausto y critica la vacilante reacción de la parte alemana. Con respecto a las declaraciones de Abbas, el vicepresidente ejecutivo, Christoph Heubner, ha señalado que «utilizó deliberadamente el escenario político en Berlín para difamar la cultura alemana de la memoria y la relación con el Estado de Israel».

Con su vergonzosa e inapropiada comparación con el Holocausto, Abbas ha intentado una vez más encender la agresión antiisraelí y antisemita en Alemania y Europa». El comisionado de antisemitismo del gobierno federal, Felix Klein, también se ha opuesto a las declaraciones de Abbas. «Al poner el Holocausto en perspectiva, el presidente Abbas carece de sensibilidad hacia nosotros, los anfitriones alemanes».