Elecciones en Brasil
Petrobras habría sobornado a varios miembros del partido de Rousseff
El exdirector de la petrolera dice que pagó comisiones del 3% sobre el valor del contrato
abc
Las presuntas corruptelas en la gigante petrolera brasileña Petrobras amenazan de nuevo la reelección de Dilma Rousseff , a un mes de las elecciones generales. Esta vez ha sido el exdirector de la compañía Paulo Roberto Costa -que se enfrenta a 30 años de cárcel ... por su presunta vinculación a una red de lavado de dinero- quien ha señalado a 62 parlamentarios de la coalición en el Gobierno. La mayoría son del Partido de los Trabajadores (PT), la formación de Lula da Silva y Rousseff, pero también menciona a Eduardo Campos, del Partido Socialista, fallecido en un accidente aéreo el pasado agosto.
Las acusaciones de Costa, recogidas por varios medios brasileños, apuntan a que, durante los años en los que fue director de Refinación y Abastecimiento (2004-2012), los diputados implicados habrían recibido comisiones del 3% sobre el valor de cada contrato firmado por Petrobras . No obstante, las confesiones del exfuncionario a la Policía se producen bajo régimen de confesión, lo que le permitiría obtener beneficios penitenciarios y una reducción de pena. Para ello, ha señalado con nombres y apellidos a los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, y al ministro de Minas y Energía. En esta lista también aparecen exgobernadores de estados donde Petrobras ha emprendido importantes obras en los últimos años, como Río de Janeiro, Maranhao y Pernambuco. Todos estos políticos, contactados por la revista «Veja», negaron haber recibido dinero de Costa.
«Brasil se ha despertado hoy perplejo con las más graves denuncias de corrupción de nuestra historia reciente», dijo ayer el candidato opositor a las elecciones Aecio Neves, que recordó otro escándalo de sobornos en el que estuvo implicado Lula da Silva. En 2006, el fundador del PT fue investigado por presuntamente comprar votos para asegurarse apoyos en el Congreso durante su primer gobierno. Por este caso - «Mensalao» (mensualidad en portugués) -, fueron condenados 25 personas en total, entre ellas varios altos cargos de la formación de Lula. Pese a todo, fue reelegido en 2006 muy por delante de sus rivales.
Rousseff, arrinconada
La historia se repite, pero esta vez la popularidad de Lula puede no bastarle a Rousseff para su reelección. La mandataria brasileña fue señalada por otro alto cargo de Petrobras. Esta vez fue el expresidente José Sergio Gabrielli, quien acusó a la presidenta de ser la responsable de comprar, con posibles irregularidades, una refinería en EE.UU., causándole a la compañía importantes pérdidas millonarias.
Las pesquisas se han llevado a cabo este año, en plena campaña electoral. Aunque finalmente ha sido exculpada, las acusaciones le han asestado un duro golpe a su popularidad. La oposición ha utilizado este caso para criticar el «excesivo» intervencionismo del Gobierno en la gestión de la compañía. Petrobras ha perdido la mitad de su valor en Bolsa en solo cinco años.
Petrobras habría sobornado a varios miembros del partido de Rousseff
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