El esoterismo prolifera en una Venezuela en crisis

El esoterismo que practican los astrólogos, videntes, tarotistas, fumadores de tabaco, el «reiky» (péndulo), santeros, babalaos, caracoles y toda clase de brujos tiene un mercado cautivo en el país, teniendo al difunto Hugo Chávez como su mejor referente. Los venezolanos acuden cada vez más a hurgar en su futuro para saber qué pasará con su vida y la del país en la medida en que la incertidumbre se apodera de la población.

Y es que intencionalmente o no en medio del oscurantismo que vive Venezuela, la política de control de los medios de comunicación y la falta de libertad de expresión ha impulsado el mundo de la astrología y el esoterismo. Nadie cree en las brujas pero todos se justifican: «de que vuelan, vuelan». Y por si acaso miran de reojo el horóscopo o las últimas predicciones sobre lo que va a pasar en el país.

Así tenemos que el deporte nacional es predecir cuándo y cómo va a caer el régimen. Se escuchan apuestas, especialmente por las redes sociales. Entre los más sonados tenemos al angeólogo Juan Carlos Avila, quien el pasado 25 de julio predijo: «desvelos, angustias o deseos. El juego esta trancado, las bases se movieron y además se repartió el miedo gratis, ahora sí llegó la vulnerabilidad a los altos gobiernos y se demostrará con hechos todo aquello de lo cual se acusa a los implicados».

Meredith Montero. Sus predicciones del pasado 25 de julio señalan: «las cartas comienzan hablando de los intercambios comerciales. Hablan de 2 años de problemas, incluso cuando el Gobierno no esté…Siguen actos de corrupción relacionados con una de las herederas, pero también hablan las cartas que otra de sus herederas tendrá que enfrentar fuertes complicaciones de corrupción con su pareja. Y vuelve a aparecer la salud de Nicolás Maduro, espalda, médula o algo por esos lares, sale nuevamente mal aspectado para él, una rabia o mucha tensión lo llevara a una recaída de salud y tendrán que socorrerlo».

Virginia Escobar también lanzó sus predicciones del 25 de julio. «Cada día se concretan más los cambios. A Venezuela le demandan explicaciones de otros países por malversación de fondos o alianzas ilegales. El venezolano aún no ve la salida de esta gran crisis, o piensa que pasarán muchos años antes de que esto termine. Son pocos los que entienden que todo está en vías de extinción y que el cambio se puede retrasar, poro no evitar». Sus cartas dicen: «El heredero perderá la herencia». Veo sentimientos al extremo en las calles de Venezuela, habrá arrebatos de pasión, de dolor y de triunfo. Es lo que se llama «choque de sentimientos encontrados».

Pero el más polémico de todos es el «profeta» Reinaldo Dos Santos, residenciado en Miami, al que Nicolás Maduro le tiene pavor y le prohibió entrar a Venezuela por haber pronosticado su eventual caída.