Ucrania se prepara para un posible corte del gas de Rusia

La carta, fechada el pasado 25 de abril, fue enviada por la asociación de ciudades eficaces en energía (EECU) que engloba a autoridades locales de las regiones del Este y el Oeste del país, que suman, en total, dos millones de personas.

La carta agrega un grado más de polémica al ya delicado debate sobre la necesidad de que la UE reduzca su dependencia energética de Rusia. Y es que cerca del 40% del gas ruso que consume el bloque de 28 socios europeos pasa por Ucrania. Además, cerca de un tercio del gas que Europa importa de Rusia proviene del gigante ruso Gazprom, lo cual la coloca en una posición muy vulnerable si se declarase una «guerra energética».

Cinco ciudades firmantes de la misiva son del este de UcraniaSegún el presidente de la EECU, Volodimir Harazd, es «vital» que Ucrania reduzca su dependencia del gas ruso debido a las «acciones hostiles y a menudo agresivas de la Federación Rusa» contra Kiev y a la «capacidad limitada del gobierno central (interino) de Ucrania para dar respuesta a esas acciones».

«Les pedimos que compartan con las ciudades ucranianas eso (las capacidades técnicas de la UE para lograr la eficacia energética) con el lanzamiento urgente de un programa de cooperación que proporcione a nuestras ciudades las capacidades y los recursos necesarios para gestionar la crisis (energética) masiva», asegura Harazd en la carta.

Al menos cinco de las 35 ciudades que han firmado la misiva están situadas en el Este del país (de mayoría rusa), donde las simpatías suelen decantarse hacia Moscú.

No obstante, Tatiana Nikolaevna, la primera teniente de alcalde de Artemivsk, una ciudad en la frontera rusa, ha dado su apoyo incondicional al llamamiento de Harazd. «El alcalde (de esa ciudad) está al corriente de esa carta y la apoya», aseguró Nikolaevna en declaraciones a EurActiv el pasado lunes. «Nuestro consistorio fue elegido para mejorar las condiciones de vida de sus ciudadanos e intentar ofrecerles niveles de vida comparables a los europeos», explicó.

«Una de nuestras principales metas es ahorrar fondos públicos utilizando recursos energéticos seguros…el principal objetivo de este proyecto es (también) ahorrar recursos energéticos», agregó la funcionaria.

La carta fue enviada a «Energy Cities», una plataforma que amalgama a cerca de 1.000 autoridades locales europeas que trabajan en pro de ciudades sostenibles y que respeten el medio ambiente.

En ese sentido, Gérard Magnin, director de «Energy Cities», aseguró a EurActiv en Bruselas que el llamamiento de las ciudades ucranianas demuestra que la política de ahorro energético puede «movilizar y sumar esfuerzos».

«Las diferencias políticas entre los países se pueden superar cuando la gente corriente intenta encontrar soluciones comunes a los problemas comunes», agregó.

De momento, como medida de apoyo a la EECU, «Energy Cities» ya ha hecho llegar su propia carta al comisario de Energía de la Unión Europea (UE), Günther Oettinger. En ella, Eckart Wurzner, alcalde de la ciudad germana de Heidelberg y presidente de “Energy Cities”, pide que aumenten los contactos entre los socios de la UE para colaborar con los planes estratégicos de acción en materia energética de Ucrania. También propone que la UE dedique más espacio a la eficacia energética en el informe sobre seguridad energética que la UE tiene previsto publicar en junio próximo.

«Si la Comisión Europea intensifica su apoyo para (establecer) ese tipo de cooperación, no cabe duda de que muchas autoridades locales en la UE estarían dispuestas a proporcionar más ayuda técnica a sus colegas ucranianos», asegura Eckhart en la carta, a la cual también tuvo acceso EurActiv.

El asunto está en el foco de atención de la UE, especialmente después de que un Consejo Europeo de Energía calificara en marzo pasado la eficacia energética como “primer paso” para reducir la elevada dependencia europea del gas ruso.

Según fuentes de Bruselas, un objetivo «vinculante a nivel de la UE» del 30% de mejora en eficacia energética para 2030 podría ser objeto de negociación de los responsables políticos europeos en las próximas reuniones sobre el tema, el mes que viene.

Un borrador de trabajo no oficial, proveniente de fuentes diplomáticas británicas, al que ha tenido acceso EurActiv asegura que la eficacia energética debería ser un «elemento clave» en la próxima estrategia de seguridad energética de la Comisión Europea.

«El Consejo (europeo) de junio debería encargar a la Comisión que realizara un análisis de los costes que supondría reducir la vulnerabilidad de los países de Europa Central y Oriental en caso de interrupción del suministro de gas ruso mediante la aplicación de medidas de eficacia energética, y que luego informara (Bruselas) al Consejo en octubre», asegura el texto.

El mes pasado, Ucrania aseguró que tal vez tenga que pedir ayuda a la UE para garantizarse el suministro de gas en caso de embargo ruso de sus suministros. Posteriormente se activó un acuerdo, gracias a la mediación de Estados Unidos, para reconducir gas a Ucrania desde Eslovaquia.

No obstante, queda la pregunta sobre cuánta cantidad de gas se podrá reconducir (técnicamente el proceso se denomina en inglés “reverse-flow, o flujo inverso). Además, hay desconfianza entre los socios europeos ante las dificultades de Kiev para satisfacer sus deudas energéticas, según puso de manifiesto recientemente el ministro ucraniano de Energía, Yuri Prodan, en entrevista a ABC.