Al-Qaida ataca de nuevo a Hizbolá en su feudo de Beirut

El recién estrenado gobierno del primer ministro libanés Tamman Salam empieza de la peor manera posible. La actuación de dos suicidas pertenecientes a un grupo vinculado a Al-Qaida ha dejado al menos seis muertos y más de setenta personas heridas en la periferia del sur de Beirut, feudo de Hizbolá en la capital libanesa.

Las explosiones se producían esta mañana en el poblado barrio de Bir Hassan, a poca distancia del Centro cultural iraní y en las inmediaciones de la embajada de Kuwait. Las primeras informaciones disponibles, todavía confusas, hablan de la presencia de dos suicidas en sendos coches cargados con explosivos, si bien otras fuentes se refieren al empleo de un coche bomba y de una moto en el ataque. La primera de las detonaciones afectó a una tienda de dulces mientras que la segunda, producida en un intervalo de segundos y a apenas 100 metros, tenía como objetivo el Centro Cultural.

La embajada Kuwaití ha confirmado que ningún miembro de su personal ha resultado herido, los iraníes, por su parte, aseguraban también que no había que lamentar pérdidas entre el personal del Centro Cultural. El barrio de Bir Hassan ya fue atacado el pasado mes de noviembre en otro atentado suicida dirigido contra la propia embajada de Irán y que arrojó la cifra de 23 muertos. El área alberga igualmente la Agencia Oficial de Noticias Iraní, IRNA, y una televisión del país. En el escenario, una pesadilla cada vez más familiar para los libaneses, podían contemplarse además coches ardiendo y varios edificios severamente dañados por las dos deflagraciones.

Del ataque se han hecho responsables en su cuenta de Twitter las Brigadas de Abdullah Azzam, un grupo terrorista afín a Al-Qaida, que ha llamado en numerosas ocasiones a la lucha contra Hizbolá por su apoyo al régimen del presidente sirio Bashar al Assad.

El primer ministro del Líbano, Tamman Salam, que consiguió finalmente formar gobierno el pasado sábado después de diez meses de vacío de poder, condenó duramente los atentados aclarando que el país hará frente a la amenaza terrorista con «unidad y solidaridad y con la ayuda del ejército y las fuerzas de seguridad ». El líder suní Saad Hariri, firme crítico de la implicación de Hizbolá en Siria, ha emitido también un comunicado en el que quiso dejar constancia de la unidad de todas las fuerzas políticas libanesas frente a las brutales agresiones terroristas que pretenden desequilibrar el nuevo gobierno.