El excanciller Schröder trata de impulsar la campaña del socialdemócrata Steinbrück

No son días como aquellos, como cuando Schröder derrotó a Helmut Kohl (CDU), pero algo de esos «días» quiere atraer Steinbrück en estas elecciones. La oposición va perdiendo según la encuesta Forsa del miércoles y dado que ni verdes ni SPD quieren aliarse a los excomunistas de La Izquierda, la coalición gobernante de Merkel –CDU y liberales– ganaría cómodamente las elecciones generales del próximo 22 de septiembre.

Y ahí tenemos a Schröder intentando paliar unos resultados más bien negativos con algo de «aquellos días». El veterano político de 69 años y de origen humilde logró imponerse a Kohl en coalición con Los Verdes en 1998. Reforma la ley de nacionalidad, el sistema de pensiones y de impuestos, asumiendo políticas claramente ecológicas (desarme nuclear y uso energías renovables). Su colaboración con la Francia de Jacques Chirac fue famosa ya que cimentó el eje de la Unión Europea. Su segundo gobierno no fue sin embargo tan exitoso: con su impopular «Agenda 2010» –que ha salvado finalmente a Alemania de la crisis– debió llamar a elecciones que ganó la actual canciller. Pero eso fue en 2005. Hoy, con los Toten Hosen de fondo y haciendo un paréntesis en su vida de abogado, vuelve Schröder a las tablas: «¡Desde que yo aprobé la Agenda 2010 no ha vuelto a hacerse nada en este país!», ha presumido el jerarca.