Mursi remodela el gobierno egipcio para dar un impulso a la economía

La oposición no islamista lleva meses exigiendo una reforma del gobierno que incluya a miembros independientes y con un perfil más técnico, por lo que es más que probable que esta remodelación no cumpla con sus expectativas que tenían, como primera exigencia, la sustitución del primer ministro Hisham Qandil, que mantiene su puesto.

Entre los ministros que se marchan se encuentran los dos que más activamente han participado en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional por un préstamo de 4.800 millones de dólares, que supondrá un alivio para las maltrechas reservas de divisas del país. Ashraf el Arabi ha sido sustituido hoy por Amr Darrag al frente de la cartera de Planificación y Cooperación Internacional. Darrag, un alto cargo de la cofradía islamista, era hasta ahora presidente de la Comisión para Asuntos Exteriores del Partido Libertad y Justicia (PLJ), el brazo político de la hermandad. Fayad Abdel Moneim Ibrahim, un experto en economía islámica y doctorado por la universidad de Al Azhar, encabezará el ministerio de Finanzas, en sustitución de El Mursi el Sayed Higazy.

El nuevo ministro de Inversiones, Yehia Hamed, también pertenece a de los Hermanos Musulmanes, por lo que se incrementa la cuota en el gobierno de miembros de la cofradía o del PLJ que, tras la remodelación son 10 de un total de 36.

La cartera de Justicia, de la que dimitió el juez Ahmed Mekki el mes pasado por las desavenencias entre el poder judicial y el gobierno, será ocupada por el magistrado Ahmed Suliman. También han jurado esta mañana su cargo los nuevos ministros del Cultura, Antigüedades, Asuntos Parlamentarios, Agricultura y Petróleo. Este último será ocupado por Sherif Hedara, que se enfrenta a un ministerio complicado en un momento especialmente peliagudo, en el que tendrá que hacer frente a la escasez de combustible que ya sufre Egipto y a la problemática reforma de los subsidios a la gasolina.