Margaret Thatcher recibirá un funeral similar al de la Reina Madre y Diana de Gales

Protocolariamente, el acto «ceremonial» es un nivel menor que el funeral de Estado, un acontecimiento que requiere una decisión específica del parlamento. Winston Churchill fue el último ex primer ministro en ser despedido con un funeral de Estado, en 1965. La baronesa Thatcher tendrá un funeral equivalente al que recibieron Lady Di en 1997 y la Reina Madre en 2002, un rito que incluye una procesión entre Westminster y la catedral de Saint Paul entre honores militares.

La oficina del primer ministro David Cameron, que se encontraba de visita en Madrid , ha explicado que al acto «serán invitados un amplio y diverso grupo de personas». El funeral será sufragado por el Estado y por los herederos de la baronesa. «Después de la ceremonia habrá una ceremonia privada de cremación. Todos los detalles se están decidiendo conforme a los deseos de la familia de Lady Thatcher», concluye el texto.

En Reino Unido, elfuneral de Estado está reservado a los monarcas y a personalidades como Isaac Newton, Horacio Nelson o Winston Churchill. La diferencia más reseñable con el funeral ceremonial que recibirá la Dama de Hierro es que el carro del féretro del fallecido es tirado por soldados de la Marina en el primer caso, mientras que en el ceremonial el carro del féretro es tirado por caballos. «Al ciudadano normal le parecerá un funeral de Estado», ha explicado una fuente gubernamental a «The Guardian».

La salud de Margaret Thatcher comenzó a fallarle hace una década, cuando empezó a sufrir pequeños infartos cerebrales en 2002, que le obligaron a apartarse de la vida pública. En 2008 su hija Carol desveló que la anciana octogenaria padecía demencia. Tenía diagnosticado alzheimer. Vivió recluida en su mansión en Belgravia, en un estado de apartamiento agravado por el fallecimiento de su esposo Denis en 2003, tras 50 años juntos.

Su estado de salud le impidió participar en una fiesta por su 85 cumpleaños en Downing Street en 2010. Y, el pasado 20 de diciembre, Lady Thatcher era ingresada para ser sometida a una leve operación de vejiga, y pasó allí las Navidades en compañía de su círculo más íntimo.