Yemen inicia el proceso de diálogo nacional hacia la transición

«En nombre del pueblo yemení, os pido dejar el pasado con todas sus circunstancias y poner fin a la herencia del conflicto para establecer un Estado civil moderno basado en la shura (consultas entre distintas partes)», dijo Hadi en un discurso.

Ante los más de 500 representantes de partidos y facciones políticas reunidos en Saná, Hadi consideró que los sacrificios son necesarios, aunque sean dolorosos, porque «serán un logro político para las futuras generaciones».

El presidente yemení destacó que los asistentes al diálogo deben buscar un consenso para solucionar la situación en el sur del país, lo que -dijo- será «clave para resolver otros problemas».

Los independentistas sureños de Yemen, cuyos dirigentes han decidido boicotear la conferencia, acusan al gobierno central de discriminar a los ciudadanos del sur por lo que abogan por la independencia de Yemen del Sur de la actual República del Yemen, formada en 1990.

Para Hadi, hoy es un «gran día en el que los yemeníes abren una nueva página en su historia actual. Yemen no volverá a ser como antes»".

En su opinión, hay que cambiar los «sistemas de administración y costumbres del antiguo poder que al final han fracasado y aprender de los países modernos».

La misión de esta conferencia, además de tratar los conflictos pendientes, es elaborar una nueva Constitución y organizar elecciones parlamentarias y presidenciales para febrero de 2014.

El diálogo nacional es uno de los puntos principales de la iniciativa del Consejo de Cooperación del Golfo auspiciada por la ONU, para dar una salida a la crisis de Yemen, desencadenada tras las protestas iniciadas en enero de 2011 contra el entonces presidente, Alí Abdalá Saleh.

El plan del CCG (integrado por Arabia Saudí, Omán, Catar, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos y Baréin), firmado en noviembre de ese año, condujo a la renuncia definitiva de Saleh, en febrero de 2012.

Saleh fue sustituido en el cargo por Hadi, que en esa época era el vicepresidente y que se impuso en unos comicios presidenciales en los que fue el único candidato.

Al acto de hoy también acudieron el secretario general de la Liga Árabe, Nabil al Arabi, y el enviado especial de la ONU para el Yemen, Yamal Benomar.

Benomar afirmó que «ya es el momento de los yemeníes» y calificó el proceso de transición de «un ejemplo para el traspaso democrático en la zona».

Durante su alocución, insistió en que la iniciativa del CCG ha permitido que haya un proceso integral de cambio sin reproducir el régimen anterior, ya que «la voluntad popular estaba a favor del cambio verdadero».

El representante de la ONU destacó que, comparado con los otros levantamientos de la primavera árabe, como Egipto, Túnez y Libia, el de Yemen es el único caso donde se está realizando un traspaso de poder a través de «un proceso pacífico de negociaciones».

Benomar indicó que el diálogo que llevará al cambio democrático y a la solución de los problemas pendientes del país como la causa sureña y el conflicto de los rebeldes chiíes en la provincia de Saada.

La demandas de estos grupos de independencia o una mayor autonomía suponen una amenaza a la integridad del estado, que se convirtió en un solo país el 22 de mayo de 1990 tras la unión del norte y del sur.

El diálogo nacional es una de las etapas más importantes de la transición, pero las divergencias políticas han provocado que su inicio se retrasase en varias ocasiones y siembran de dudas el resultado de la propia conferencia.