DE UN VISTAZO

Pujanza económica y gran calidad de vida

 

Villa histórica de rico pasado y floreciente presente, Arganda del Rey afronta un prometedor futuro incrementando su potencial económico, apostando por el crecimiento sostenido y reforzando su posición de capital del sureste madrileño

Pronunciar Arganda del Rey en cualquier parte del país invita, casi al instante, a hablar de vinos, quizá también de toros, dada su secular tradición de encierros, recortes y demás fiestas taurinas. Arganda suena, y quiere seguir haciéndolo, también por su pujanza económica, y por su calidad de vida, asegurada por un crecimiento constante pero sostenible.

A poco más de 20 kilómetros de la capital se encuentra Arganda del Rey, villa histórica de rico pasado, floreciente presente y prometedor futuro. Capital del sureste madrileño, Arganda cuenta con unos 47.000 vecinos, una población que casi triplica la de hace unos quince años: la razón hay que buscarla en su potencial económico, el mismo que hace que la localidad disfrute casi de una situación de pleno empleo.

Este importante incremento poblacional de los últimos años no ha motivado un déficit en los equipamientos y servicios que la localidad presta a sus vecinos: Arganda ha visto incrementado sus instalaciones de dotaciones educativas, deportivas, culturales, sociales o de seguridad.

También las sanitarias, y eso que aún ha inaugurarse el ansiado centro hospitalario que preste servicio a toda la comarca: sólo faltan dos meses para que el Hospital del Sureste esté terminado.
Las zonas verdes tampoco han empezado a escasear con la nueva inyección poblacional de las últimas décadas. Se han creado nuevos parques, se han rehabilitado y ampliado otros, y se han reforestado y plantado zonas enteras. Casi la mitad de Arganda del Rey, además, forma parte del Parque Regional del Sureste, por lo que es suelo protegido.

Esa protección también se extiende, para alegría de tantos vecinos, a la mitad de las viviendas que se acometen en la localidad desde que se puso en marcha el último Plan General de Ordenación Urbana (PGOU).

Vigente desde 1999, este planeamiento preveía un crecimiento del entorno de las 7.500 viviendas, y las últimas ya se están poniendo en marcha, con coletazos de alegría incluidos como los vividos en los multitudinarios sorteos de pisos públicos que se están celebrando en los últimos meses.
En los próximos años a buen seguro que se seguirá apostando por la vivienda pública, tan necesaria, aunque las nuevas promociones vendrán fijadas en un nuevo Plan General pendiente de redactar. Ahí se establecerán las pautas de la futura Arganda del Rey, determinando cuánto crecerá, y por dónde. Los vecinos, en buena medida, tendrán que decidirlo.

Este nuevo planeamiento también determinará cuánto suelo se destinará a implantar nuevo tejido económico. El que ya trabaja en Arganda constituye la clave del imparable desarrollo argandeño, un auge que todo indica que se mantendrá e incluso incrementará en los próximos años: está a punto de concluir un parque empresarial que se prevé que genere unos 3.000 empleos, y se ha acordado crear otro que traerá 6.000 puestos más.

La óptima red de comunicaciones de Arganda del Rey tiene mucho que ver en esta amplia demanda empresarial para instalarse en la localidad. Los accesos y el interior de la ciudad, además, estarán también mejor conectados cuando concluya totalmente la AR-30, una M-30 a nivel local.
A más empleo, más trabajadores, más vecinos, y éstos precisan nuevos servicios y equipamientos. El Ayuntamiento no para de habilitar nuevas dotaciones y ya planea muchas más, e incluso «regala» a sus vecinos citas culturales tan importantes como el macro festival musical «Rock in Rio», que se celebrará en la localidad las tres próximas ediciones. La rueda del progreso gira sin cesar en Arganda, y nada parece detenerla.

Claves de futuro

Empleo. Centro económico en auge, sobre todo por sus industrias y servicios, Arganda del Rey acomete dos parques empresariales que prevén crear unos 9.000 empleos. Se seguirá apostando por sectores tradicionales como el vinícola.

Vivienda. Se potenciará el parque residencial de la ciudad. Se plantea un crecimiento sostenido, con la mitad de las casas con protección. Lo tendrá que articular un nuevo planeamiento urbanístico que se tendrá que redactar.

Equipamientos. La apertura del primer hospital, de un centro para discapacitados o de nuevas instalaciones culturales, medioambientales o educativas no serán suficientes: el crecimiento poblacional motivará la construcción de nuevas infraestructuras: se planea otro centro cultural.