Gerardo Fernández Albor

Nacido en Santiago de Compostela en 1917, este médico doctorado en Medicina y Cirugía no comenzó a manifestar sus inquietudes políticas hasta la llegada de la democracia a nuestro país. Firme defensor de la cultura gallega, destacó por sus actuaciones para impulsarla -como el Patronato Rosalía de Castro o el Instituto de la Lengua Gallega, entre otros-, lo que le granjeó el apoyo de varios galleguistas del PSOE en su primer mandato. Simpatizó con Manuel Fraga, presidente de Alianza Popular, quien decidió incorporarle a las filas de su partido después de aprobarse el Estatuto Autonómico, el 7 de febrero de 1981. Su inexperiencia en el campo de la política no fue óbice para que aceptase el ofrecimiento de Fraga.

Su primer mandato pasará a la historia por la controversia sobre la capitalidad de la Comunidad, que al final distribuyó designando a Santiago como capital poltica y sede del Parlamento gallego y La Coruña como sede del Tribunal Superior de Justicia de Galicia (TSJG). En diciembre de 1986 ocupó la Presidencia de AP, tras la dimisión de Fraga, y con la desaparición del partido se unió al PP. Fue miembro del Parlamento Europeo hasta 1999 y después siguió vinculado a la política como asesor de la Consellería de la Presidencia de la Xunta.

I legislatura: En octubre de 1981, Gerardo Fernndez Albor se convirtió en el primer presidente de la Xunta de Galicia de la democracia. Salió elegido casi por carambola, puesto que iba para consejero (conselleiro) con el partido de Adolfo Surez, Unión de Centro Democrtico (UCD) y result designado por Alianza Popular (AP) sin estar afiliado a esta formación política. Fue investido presidente con 52 votos de un total de 71, con los apoyos de AP, UCD y tres diputados galleguistas del PSOE.

II legislatura: El segundo Gobierno de Fernández Albor fue efímero y se esfumó en 18 meses, a pesar de que AP bordeó la mayoría absoluta con 34 diputados. El PSOE de González Laxe avanzó hasta los 22 escaños y Coalición Galega, en su debut, logró 11. Una crisis interna en el partido de la Xunta provocó la marcha del vicepresidente José Luis Barreiro -que fue sustituido por un jovencísimo Mariano Rajoy- y cuatro consejeros más en 1986 y se generalizaron los ataques a Albor, que sólo aguantó hasta el verano de 1987. La oposición se unió para fraguar la primera y única moción de censura que ha triunfado en 28 años de autonomía gallega. El PSOE de González Laxe, Coalición Galega y el Partido Nacionalista Galego de González Marias desbancaron a Albor. El tripartito fue liderado por el dirigente socialista.