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ABC Cultural

«Con el cerebro de una oveja»: así era el general que ejecutó al 10% de la población de Manila en la IIGM

Nunca se encontró el cadáver del general Iwabuchi, que se murió en extrañas circunstancias al final de la Segunda Guerra Mundial sin explicar por qué asesinó a cien mil inocentes en la capital filipina

Morir matando: el recuerdo traumático de los supervivientes españoles de la masacre de Manila

Prisioneros heridos de la batalla de Manila, en el campo de prisioneros de Bilibid, en 1945 MUSEO NACIONAL DE SALUD Y MEDICINA

Israel Viana

Madrid

Mucho se ha escrito sobre Sanji Iwabuchi desde 1945, sin que nadie haya sabido desentrañar cuáles fueron las razones exactas que llevaron a este general japonés a desobedecer las órdenes de sus superiores y sembrar el terror en la capital filipina cuando la Segunda Guerra Mundial ... iba a terminar. En su novela 'Dejé mi corazón en Manila' (La Esfera de los Libros, 2020), Marta Galatas lo describe como «tozudo y fanático». Para John Kennedy Ohl, «Iwabuchi no quería sobrevivir a otra derrota, especialmente sin ofrecer batalla, y decidió luchar hasta la muerte por la ciudad».

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