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ABC Cultural

El día que Alemania destrozó su propia Armada: la hazaña más insólita de la Primera Guerra Mundial

Una semana antes de que se firmara el Tratado de Versalles, el contraalmirante Ludwig von Reuter hundió 57 barcos entre acorazados, cruceros y destructores de su propia flota en Scapa Flow para que no cayeran en manos de los ingleses

Israel Viana

A finales de junio de 1919, en los últimos suspiros de la Primera Guerra Mundial y pocos días antes de que se firmara el Tratado de Versalles, se repitió muchos días en ABC el siguiente titular: « El hundimiento de la escuadra alemana ». Los ... artículos hacían referencia a la orden dada por el contraalmirante Ludwig von Reuter de mandar al fondo del mar, en la bahía de Scapa Flow (Escocia), a su propia flota antes de que cayera en manos del enemigo: Gran Bretaña. En total, 57 barcos entre acorazados, cruceros y destructores, 400.000 toneladas de alta tecnología bélica, en la que aún hoy es considerada la mayor pérdida naval de la historia fraguada en un solo día.

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