El misterio de don Julián: el conde visigodo de Ceuta que vendió España a los musulmanes
Es considerado un de los peores villanos de la historia de España desde que comenzó la conquista en el 711, pues convenció a los árabes de que podían hacerlo, para vengarse de la presunto violación de una de sus hijas por parte de Rodrigo, el último rey visigodo
ABC
En 1986, Juan Goytisolo aseguraba en ABC que se sentía identificado por «con ese personaje ambivalente y terrible del conde don Julián, traidor y redentor al mismo tiempo, vendedor de esencias a la morería y destinado a ser castigado». Hacía 16 años que el ... escritor catalán había publicado en México la novela en la que decidió reivindicar a este personaje considerado, todavía hoy, como uno de los peores villanos de la historia de España. La razón: facilitar la conquista del país por parte de los musulmanes en el siglo VIII, para vengar el presunto abuso sexual de una de sus hijas por parte de Rodrigo, el último rey visigodo.
El título era explícito, ‘Reivindicación del conde don Julián’ , y con él Goytisolo quería defender y celebrar lo que este noble de origen misterioso y controvertido había hecho, más allá de las consecuencias que hubieran podido tener sus actos. Una actitud valiente si tenemos en cuenta que, a lo largo de los 13 siglos anteriores, su figura había sido condenada y censurada en España. El mismo Franco no permitió que la novela se publicara mientras él viviera, pues la consideraba antipatriótica y anticatólica, mientras que Mario Vargas Llosa creía que era «la obra más conmovedora del escritor».
«El conde don Julián sería algo así como la serpiente responsable de la salida de España del paraíso. Es decir, España vivía en el paraíso godo cuando Julián la vendió a los musulmanes. Así es cómo las Crónicas y el Romancero enfocan el tema de la ‘pérdida de España’», explica Mariam Mahmoud Aly Meky al comienzo de su tesis sobre el personaje, que tuvo su apogeo en la Edad Media y continuó en el Siglo de Oro. Y aunque fue perdiendo importancia con el paso del tiempo, volvió a resurgir en el siglo XX con el nuevo enfoque aportado por Goytisolo. «Un punto de vista totalmente opuesto al defendido hasta entonces, con el que el escritor exige su vuelta a España y lo impone como un ideal», añade la filóloga.
Witiza contra Rodrigo
Pero, ¿quién era exactamente don Julián y qué hay de cierto es lo que se cuenta de él? ¿Fue realmente responsable de la conquista de la Península Ibérica a partir del año 711 ? La historia comienza en el 702, cuando Égica, el Rey de los visigodos, fallece de muerte natural. No era habitual entre godos, sumidos desde hace décadas en sangrientas luchas por el poder, pero así ocurrió esta vez. Su hijo Witiza quedó entonces como único monarca y trató de consolidar su posición, nombrando duque de la región Bética a Rodrigo. No era una forma de compensarle por sus servicios, sino de alejarlo del trono.
Rodrigo, sin embargo, no se mantuvo leal y pacífico en su nueva posición. Al contrario, se fue haciendo con el liderazgo de un grupo de señores descontentos con Witiza y comenzó a conspirar contra él. Cuando el Rey godo intentó capturarlo, el nuevo duque de la Bética organizó un gran ejército y le declaró la guerra, en la que no se quedó contento con derrotarle y arrebatarle el trono, sino que ordenó que le sacaran los ojos, tal y como este había hecho anteriormente con su padre. Y, por último, lo desterró a Córdoba para que sufriera la misma penitencia que su progenitor.
Rodrigo fue proclamado Rey de los visigodos en el 710 y dedicó los primeros años de su Reinado en perseguir a los hijos de Witiza, que huyeron a Tánger. Allí fueron acogidos por un conde amigo de su padre que, a su vez, era socio del conde don Julián, pues ambos tenían la responsabilidad de defender las ciudades visigodas del Estrecho de Gibraltar, de los continuos ataques de los musulmanes, ya que estos dominaban casi todo el norte de África. Aquí es donde aparece en escena Florinda, la hija de nuestro protagonista y causa, según la teoría más extendida, de que la Península acabara en manos de los árabes durante los cinco siglos siguientes.
La agresión sexual
En aquella época era costumbre que los nobles enviaran a sus hijos a educarse a la Corte de Toledo, cerca del monarca. Eso fue lo que hizo el conde don Julián, según una de las versiones, para que Florinda recibiera la formación más acorde a su rango y para que hiciera los contactos necesarios de cara al futuro. Una vez allí, esta fue elegida como una de las doncellas del séquito real, destinada al servicio personal de Rodrigo. Su función era, al parecer, extraerle la sarna a diario con un alfiler de oro. Uno de esos días, sin embargo, el monarca la vio desde su ventana bañándose desnuda en el actual puente de San Martín, en el río Tajo, y se enamoró de ella y quiso forzarla a mantener relaciones sexuales con él.
En el Romancero comenta que «ella dice que hubo fuerza; él, que gusto compartido». Es decir, que no aclara si hubo o no violación, al contrario de lo defendido en el libro de Miguel de Luna , ‘La verdadera historia del Rey Don Rodrigo’, publicado en 1606, donde el autor asegura que sí hubo violación. Sea como fuere, Florinda, conocida como ‘La Cava’, que en las crónicas árabes era sinónimo de ‘prostituta’ o ‘mala mujer’, escribió a su padre contándole lo sucedido. El don Julián acudió a buscarla a Toledo y se la llevó con él a Ceuta. Una vez allí, según la versión más aceptada, el conde traicionó a los visigodos y se pasó al bando musulmán con el único objetivo de vengarse contra el Rey Rodrigo por la supuesta agresión sexual.
Nuestro protagonista se entrevistó entonces con Musa ibn Nusair , gobernador de Ifriquiya, al que informó sobre las posibilidades de conquistar la Península Ibérica. Tras llegar a un acuerdo con este, el señor de Ceuta preparó una incursión a la bahía de Algeciras que llevó a cabo, en julio del año 710, junto al comandante bereber Tarif ben Malik y 500 hombres. Los transportó en su pequeña flota y, tras desembarcar en la actual Tarifa, saquearon la zona de Algeciras sin apenas resistencia y regresaron con un botÍn gigantesco y un gran número de esclavos.
La conquista
Esta incursión animó a Tariq ben Ziyad y a su superior, Musa ibn Nusair, a iniciar la conquista del reino visigodo con un ejército de 12.000 guerreros que don Julián ayudó a transportar de nuevo en barcos comerciales para no levantar sospechas. Rodrigo, sin embargo, se enteró y envió a su sobrino Iñigo para hacerles frente, pero fue derrotado en numerosas ocasiones hasta caer muerto. Desde entonces, el conde ceutí fue acusado de traidor y conspirador. La primera vez donde aparece citado es en una crónica mozárabe del 754.
Desde entonces, la leyenda del conde don Julián ha sido un tema recurrente en la literatura española. Su historia pasó al romancero y continuó apareciendo en diferentes novelas y obras de teatro como las de José Zorrilla , que en 1843 estrenó ‘ El puñal del godo ’ y, en 1847, ‘ La calentura ’, que era la segunda parte de esta. En el siglo XIX también se publicaron ‘ El conde don Julián ’ (1839), de Miguel Agustín Príncipe, y el poema narrativo del duque de Rivas, ‘ Florinda ’ (1826). Todo ello hasta llegar a la novela de Goytisolo.
«Hay figuras en la historia eternamente interesantes. Y, para el pueblo español, ninguna como aquel traidor de don Julián, que comparte con Judas la malquerencia de aquel. Su nombre ha llenado las páginas de la leyenda, el romance, el teatro… siendo de notar que, si nada queda por decir ni inventar respecto a los principios del conde traidor, nadie, que sepamos, ha intentado determinar su fin», podía leerse en ABC, el 1 de mayo de 1926 .
Noticias relacionadas
- La verdad que Marruecos oculta actualmente: Ceuta decidió por voluntad popular que quería ser española
- El ignorado estudio de 1826 que tumbó la leyenda negra de que España exterminó a esclavos en América
- Los temerarias misiones en globo con las que España aniquiló a las tribus guerreras de Marruecos en 1909
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete