Los escándalos de corrupción del PSOE que 'Cuéntame' tendría que retratar si la histórica serie no se cancela
Desde Ibercorp hasta Filesa; en los noventa, al Partido Socialista y a Felipe González se le acumularon los escándalos económicos
M.P.V/ C.C
Las últimas declaraciones de Imanol Arias vinculando el final de 'Cuéntame ' al hecho de que, en caso de continuar, la ficción tendría que profundizar en los casos de corrupción del PSOE han provocado un terremoto de reacciones en el ente público. En declaraciones ... a ABC, el actor ha rectificado y pedido perdón por sus palabras, en tanto ni siquiera está claro que la cancelación de la serie sea cierta.
El capítulo de este jueves estuvo ambientado, como toda la temporada, en los años 1993 y 1994, durante el último gobierno de Felipe González. De hecho, el personaje de Toni Alcántara (Pablo Rivero) trabaja para la Moncloa. «Con la última victoria del PSOE, pírrica, y los pactos de Felipe González con los nacionalistas, mientras saltan a la prensa escándalos de corrupción y se produce la fuga de Luis Roldán», explicó el coordinador de guion de la serie, Sergio Barrejón, sobre el devenir de la trama de este curso. No obstante, se trata de la punta de un iceberg de escándalos que aún continuarían coleando corrupción hasta el final de la presidencia de González.
Caso Ibercorp
El Banco de Inversiones Ibercorp fue intervenido por el Banco de España, en 1992, cuando estaba bajo la presidencia del banquero Manuel de la Concha . Dos años después, la revisión de las cuentas sacó a la luz pública que Manuel Rubio , gobernador del Banco de España entre 1984 y 1992, tenía una cuenta secreta con dinero negro en este fondo por valor de 780.000 euros (130 millones de pesetas).
A causa de estas revelaciones, el 5 de mayo de 1994, Manuel de la Concha y Mariano Rubio fueron detenidos e ingresaron en prisión. En julio, la juez del caso les acusó de cohecho, estafa y apropiación indebida. El Banco Ibercorp omitió una serie de operaciones opacas detrás de un entramado de sociedades «fantasma» y ocultó información del grupo a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El supervisor bursátil abrió doce expedientes contra las sociedades y sus gestores y los tribunales tramitaron varios sumarios penales. En julio de 2002 la Audiencia de Madrid condenó a De la Concha a seis años de prisión y una multa de 6.000 euros por un delito continuado de falsedad documental.
Caso Roldán
El Caso Roldán supuso una de las mayores vergüenzas para la ejecutiva del PSOE. Exdelagado del Gobierno en Navarra entre 1982 y 1986 primero, y director de la Guardia Civil por obra y gracia de Felipe González después, Luis Roldán se convirtió en el epicentro de los medios de comunicación en 1993. Ese año, 'Diario 16' desveló que había aumentado su patrimonio a golpe de dinero público. Se dijo que era el dueño de una decena de inmuebles y que disponía de una sociedad propia llamada ' Europe Capital SL ' para administrarlos. Aquello fue una bomba política que le hizo fugarse del país en 1994.
Su particular calvario le llevó hasta París con la ayuda de uno de sus más populares amigos, Francisco Paesa , antiguo agente de los servicios secretos españoles. Para su desgracia, este fue quien le animó a entregarse. En 1995, las autoridades pidieron al espía que contactara con el fugado y le ofreciera ser juzgado solo por delitos menores. Al final, tras recorrer cuatro continentes y después de once meses, las autoridades le detuvieron en el aeropuerto de la capital de Tailandia el 27 de febrero de 1995. Su frase antes de caer preso en Bangkok se hizo famosa: «¿Ustedes son los policías españoles?».
Roldán, que había acumulado nada menos que 1.800 millones de pesetas en sus siete años al frente de la Guardia Civil, lanzó varias cargas de profundidad contra el Gobierno de Felipe González
Roldán, que había acumulado nada menos que 1.800 millones de pesetas en sus siete años al frente de la Guardia Civil, lanzó varias cargas de profundidad contra el Gobierno de Felipe González antes y después de su captura. Fue juzgado por la Audiencia Nacional por malversación de fondos públicos, cohecho, fraude fiscal y estafa. «Me equivoqué y lo estoy pagando duramente», aseguraba en 2008 a Telecinco un hombre que vio su pena reducida, finalmente, de 31 a 15 años. Sus últimos días los pasó, principalmente, en Zaragoza. Según él mismo admitió tras salir de la cárcel, porque carecía de liquidez para cambiarse de residencia.
Fondos reservados
El comisario Villarejo filtró el 9 de marzo de 1994 a la prensa que los altos mandos de la lucha antiterrorista del Gobierno del PSOE, incluyendo mandos de la Guardia Civil y gobernadores civiles, tenían un sueldo adicional a su sueldo oficial pagado directamente desde los Fondos Reservados. Valiéndose de una partida presupuestaria de libre disposición del Ministerio del Interior, el secretario de Estado de Defensa, Rafael Vera , bajo la autorización de los ministros de Interior José Barrionuevo (1982-1988) y José Luis Corcuera (1988-1993), repartió durante años sobresueldos a discreción a personas como Luis Roldán, el Director General de la Policía, Rodríguez Colorado o Gobernadores Civiles como Julián Sancristobal o Iñaki López.
Rafael Vera, como máximo responsable de los Fondos Reservados, también se benefició de estos fondos, de modo que su patrimonio durante los once años en que fue el máximo responsable de la seguridad de los ciudadanos se incrementó en 800 millones de pesetas. El 19 de octubre de 2004 el Tribunal Supremo , confirmando la sentencia que dos años antes había dictado la Audiencia Provincial de Madrid, lo condenó a siete años de prisión y 18 de inhabilitación por un delito continuado de malversación de caudales públicos.
La turbia Filesa
Nada que envidiar a Roldán tuvo el Caso Filesa y sus innumerables ramificaciones judiciales. Su germen data de mayo de 1991, cuando dos diarios nacionales publicaron que tres sociedades controladas por personas próximas al Partido Socialista habían recibido grandes sumas de dinero. Fondos que, a la postre, habían servido para sufragar la campaña electoral del partido de forma ilegal. El hombre que desveló aquella tropelía fue el contable Carlos Van Schouwen , quien vendió la información tras acumular problemas con la cúpula socialista. Él, a cambio, siempre mantuvo que lo hacía para «pedir justicia».
Aunque el caso saltó a los medios de comunicación en 1991, el proceso judicial se extendió durante años. El caso arribó al Tribunal Supremo en marzo de 1996. El resultado no pudo ser peor para el PSOE, pues se llegó a la conclusión de que el partido se había financiado de forma irregular y ocho de sus once acusados fueron condenados. La decisión de los magistrados, parece, no se verá en 'Cuéntame'
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