El pisto “de supervivencia” para todos los públicos de Luismi Menor (La Milla Marbella)

Dos zanahorias, pimiento rojo y pimiento verde, ajo, laurel, dos cebollas, un tomate, dos calabacines, puerro, tomillo, romero… “Me faltan algunas cosas pero es cocina de supervivencia”, apunta Luismi Menor, de La Milla Marbella, antes de mostrar paso a paso, y con trucos incluidos, cómo preparar un plato sencillo, delicioso y fácil de preparar. Seguro que quien más, quien menos, tiene prácticamente todos los ingredientes en su despensa. Y sino, siempre está la opción de llamar a algunas de las empresas de alimentación que realizan servicios a domicilio. Pero bueno, volviendo al tema por el que estamos ‘aquí’, a continuación os damos la receta del pisto “de supervivencia” de Luismi Menor, con ideas para que guste tanto a mayores como a los peques de la casa.

Luismi Menor apuesta por las verduras y hortalizas de Eladio para sus recetas en casa.

Para empezar, se escalfa el tomate, con idea de que la piel no aparezca en el guiso y reste al conjunto. Menor nos dice que se trata solo de quitarle “el culo al tomate, hacerle una cruz y ponerlo en agua hirviendo para poder pelarlo bien. Se saca, se le da una pasada por el baño maría frío, con agua y hielo nada más, y se le quita la piel”. Todavía no hemos terminado con este fruto dejándolo sin pipas. “Quienes tienen niños pequeños en casa seguro que sabrán que no les suele gustar encontrarse las pepitas cuando toman el pisto, así que yo lo que recomiendo es cortarlo por la mitad y sacárselas con el dedo para que quede perfecto”, continúa explicando el chef del restaurante La Milla Marbella.

El siguiente paso consiste en, sartén en mano y con aceite de oliva, sofreír el puerro, la cebolla y la zanahoria. Se le van añadiendo el ajo, el laurel, el pimiento verde y el pimiento rojo. Una vez todo esto está listo, se pone también el tomate, el calabacín y las hierbas aromáticas. “Como el tomate no soltará mucha agua, recomiendo añadir tomate triturado si tenéis y sino tomate frito. Se cuece a fuego medio para que la verdura vaya soltando su jugo y pasados unos diez minutos aproximadamente está listo para comer”, sentencia Luismi.

El punto y final está en darle su punto de sal, un poco de pimienta, una hoja de laurel y un huevo frito para mojar bien con el pan. Sencillos placeres de la vida que se preparan en apenas unos minutos sin salir de casa, con buena materia prima y con ideas tan sugerentes como la que nos da el cocinero del restaurante La Milla Marbella.