María Trifulca, un mundo de sabores junto al puente de Triana

El edificio derrocha historia y romanticismo, puesto que era la antigua estación marítima para el barco de vapor que zarpaba hacia Sanlúcar de Barrameda . Ha sido también semillería y abacería, hasta que en los años 80 se convirtió en el bar restaurante que ha llegado a nuestros días.

Este histórico y emblemático espacio de la ciudad está en manos de un grupo con experiencia en el mundo de la hostelería y de los locales nocturnos, que tiene establecimientos como La Casa del Estanque, Chile o London .

La decoración es industrial, con presencia de ladrillo, forja, hierro y madera y con unos toldos en la terraza que evocan la proa de un barco. Las impresionantes vistas son uno de sus principales encantos, panorámicas del puente de Triana, el río y la ciudad que se pueden contemplar desde la mayoría de los espacios con que cuenta.

Tiene una terraza en dos alturas en la primera planta, una zona de barra más informal en la planta baja, un salón para 40 comensales en la planta inferior , reservados con capacidad de hasta 16 comensales y una bodega en el sótano donde disfrutar sus mejores vinos.