Apertura: Hiyoki llega a Javier Lasso de la Vega

Con la apertura de Hiyoki, Zhang junto a su mujer, quien es la jefa de sala, tratará de reunir al público sevillano, que «ha respondido de muy buena forma a nuestra propuesta, por eso nos aventuramos en este nuevo espacio».

¿Qué encontramos en su carta?

A quienes ya han ido al local de Las Setas, en una primera lectura, casi todo les resultará familiar. Las grandes especialidades de esta casa, además de los sushis, nigiris y sashimis , son las gyozas , de pollo o de pato, el okonomiyaki , que es uno de los street food más populares para los nipones, y los arroces . El tataki de atún rojo y su namaharumaki , para quienes adoran el picante y las verduras, son otras de las sugerencias. Pregunten también por las ostras , pues suele ser una de sus propuestas fuera de carta.

En cuanto al menú del día , es importante saber que solo se sirve al mediodía de lunes a viernes . Incluye hasta cuatro platos para probar diferentes bocados en pequeñas cantidades.

¿Y qué hay de postre?

El último as en la manga lo intentan reservar para el final de la comida. Su oferta en este sentido no es muy amplia pero sí correcta. Las gelatinas , de mango o lichi, el helado de té verde , el dorayaki de frutos del bosque y la sopa de chocolate blanco son los más habituales.

¿Diferencias entre Hiyoki y el local de La Encarnación?

Muchas. Aunque la principal no está en la carta sino en el espacio. Si el local de La Encarnación es estrecho y tiene una terraza amable en un punto recogido de la plaza, en este nuevo establecimiento no hay acera para colocar veladores pero sí muchas más posibilidades para recrearse en el interior.

La decoración es sencilla y tiene ese gusto oriental por el reposo . Las luces, la vegetación, los muebles de madera y la música de fondo también se encaminan en esta idea. Cuentan con dos salones , grandes cristaleras que dan hacia el exterior e hileras de mesas para acoger a un número importante de comensales. El servicio, por último, trata de perseguir la excelencia en la atención. Hiyoki, el último japonés.

¿Dónde lo encontramos?

En la calle Javier Lasso de la Vega número 14.