Casa Arturo: «Comer como antes»

Comenzamos la parte de aperitivos con unos mejillones rellenos de sus carne con verduras, con un ligero empanado, bien rematados. Enseguida nos llegan sus croquetas que hacen justicia a su merecida fama y unas originales piruletas de morcilla de burgos con crujiente de arroz que tienen su punto. Recomendables.

A partir de ahí pasamos a sus platos más conocidos, un bacalao dorado perfecto en su equilibrio entre bacalao, patata y, sobre todo el punto del huevo: jugoso, sabroso, delicioso.

Y después nos decidimos a probar su fabada , que es absolutamente recomendable y más con el tiempo que nos ha estado haciendo últimamente. Muy buena, de las mejores que hemos probado en Sevilla.

Rematamos la comida con una presa ibérica de Sánchez Romero con una guarnición de patatitas y pimientos fritos que, junto con unas chuletitas de cordero, nos hablan de las habilidades en la parrilla de la cocina.

El postre inevitable aquí es la tarta de galletas con chocolate que te devuelve a la infancia de una cucharadita.

Un buen sitio para tener en cuenta en el Aljarafe más cercano, donde vas a ser tratado con familiaridad, vas a comer bien y que tiene una terraza que la hace más que aconsejable para las noches de verano que esperemos que vayan llegando ya.