Puerta Caleta: «La tradición por bandera»

Volviendo a nuestra visita de hoy, Puerta Caleta, nombrado así por la famosa playa gaditana, cuenta con el detalle de que el empedrado de su fachada está hecho con la famosa piedra ostionera, muy popular en las construcciones de la Tacita de Plata. Un establecimiento con tres ambientes, terraza, barra y comedor, para que cada cliente escoja donde se encuentra más a gusto.

Después de una cerveza en su barra, pasamos a su comedor, abarrotado un martes, síntoma de la buena salud de la que goza. Sus ventanales hacen que sea muy luminoso, con mesas perfectamente vestidas y aires que mezclan lo tradicional y lo moderno, aunque algo ruidoso. La carta es un homenaje a la cocina clásica y el producto regional, no hay nada fuera de lugar y todo sigue una línea clara.

El primer aperitivo que tomamos fue su ensaladilla de gambas, patata bien cocida, una generosa capa de mahonesa y una buena gamba, sencilla pero notable, un plato donde la experimentación puede salir muy mal.

Seguimos con sus dos croquetas, las tradicionales de jamón, con una bechamel suave, muy láctica, y unas segundas de bacalao, en el que se nota ya un interior más salado y donde el pescado es mucho más protagonista. Las frituras son otra especialidad de la casa y optamos por los boquerones, una buena materia prima que en este caso se me quedó un poco más aceitosa de lo deseable.

El plato de la comida fue su arroz meloso de presa ibérica, habitas y boletus, todo el sabor cárnico concentrado en ese caldo con el que se ligan el arroz y las setas, además de tener un punto perfecto que en estos arroces que no son secos es siempre más difícil.

El toque casquero que no podía faltar lo pusieron unas buenas mollejas de cordero que venían con patatas fritas. El postre final un canónico tocino de cielo que acompañan de yogurt para cortar ese dulzor.

Agradable comida en Puerta Caleta, un referente de cocina tradicional en la Ciudad de total confianza, que no quedan tantos. Un sitio que ha sabido conjugar esa apuesta por los platos de toda la vida en un ambiente moderno y agradable y con un servicio a la altura.