Alcalá de Guadaíra: de la variedad de sus bares a sus tortas y bizcotelas

Hacemos parada en La Albahaca , enclavado en el centro, y su vitrina a rebosar de tapas frías y sabores clásicos que representa a los bares de siempre. También por  El Carrito y El Liebre , dos referentes de carnes a la brasa, que más alejados del barullo de la ciudad, se llenan los fines de semana para comer con consistencia, cada uno a su estilo. Por último, La Cochera y Bernando introducen en Alcalá un nuevo concepto de tapa que abraza sabores nuevos.

Y es que no hay una tapa o sabor en común que los unifique a todos y caracterice a la restauración en esta localidad sevillana. Aunque sí hay un producto referente de esta localidad, el que hace que la conozcan como Alcalá de los Panaderos. « El pan ha hecho a Alcalá famosa en todo el mundo», indican desde la Oficina de Turismo , «en múltiples formas y con elaboraciones que son auténticas obras de arte». Una seña de identidad que vino dada debido a que es aquí desde donde se suministraba el pan a la capital hispalense, antes de que se industrializara el proceso de elaboración.

Caja de bizcotelas rellenas de la Confitería San Joaquín / Rafa Sánchez

Los dulces son la otra cara conocida de Alcalá y no podían faltar las confiterías en esta ruta . Las famosas tortas de Alcalá y las bizcotelas rellenas -de bizcocho, crema y merengue horneado- son originarias de esta localidad. «Tocinos de cielo, mantecados de Viena, signos, roscos de cidra y de huevo, piononos, merengues, medias lunas, de crema… cientos de variedades pasteleras, forman parte de nuestra repostería», exponen en la Oficina de Turismo, a los que se suman los dulces elaborados por las monjas del convento de Santa Clara. Visitamos dos instituciones pasteleras: la confitería La Centenaría y San Joaquín, aunque en estas fechas lo que realmente demandan sus clientes y ellos no dudan en destacar en su mostrador son los postres propios de Cuaresma como las torrijas, pestiños, galletas de sidra y empanadillas.

¿Cómo empezó todo?

Antonio Málaga abrió La Albahaca hace 16 años en el que es su primer local propio. Todo lo que sabe lo ha ido aprendiendo de forma autodidacta, trabajando desde pequeño mano a mano con su padre. «Abrir un negocio es fácil pero mantenerlo tanto tiempo es complicado, hay que echarle muchas horas a esto», confiesa Antonio. «Creo que el éxito es que soy muy exigente conmigo mismo y con el producto», añade.

¿Qué encontramos en su carta?

Lo más fácil para conocer la carta de La Albahaca es asomarse a su vitrina, preparada con esmero para que al levantar  la persiana esté todo más que medido y listo para la faena. Las propuestas son clásicas, Antonio aclara que no es precisamente de cocina moderna, «me gusta rescatar recetas antiguas, le pregunto a gente mayor cómo lo hace y así intento que no se pierda», cuenta. Mantiene unas 24 tapas diarias, donde destacan la ensaladilla, el atún encebollado y el pulpo al pimentón. Y los fines de semanas añade a la propuesta diaria lo que se le va ocurriendo, pueden ser croquetas de cola de toro, distintos tipos de arroces o algún guiso -como las papas con chocos-. Además, siempre mantiene tapas ideadas para el gusto de todos, también de los más pequeños, como la ensaladilla hecha tan solo con mayonesa, patata y huevo.

Precio por persona

Tres tapas y dos bebidas salen por unos diez euros, y puede comer una persona.

Horario

El horario aquí siempre ha sido particular y los clientes lo comentan con guasa, incluso han llegado a crear una página en Facebook con el nombre «Yo tampoco me aclaro con los horarios de La Albahaca». En realidad, todos los días está abierto hasta las 16.30 y el viernes es el único día que abre también por la tarde. Descansa los domingos.

Dirección

Madueño de los Aires, 34.

Teléfono

606300285.

¿Qué proponen?

«Si quieren algo de guiso una tapita de carne en salsa y si se prefiere algo frío, la ensaladilla o el atún encebollado».

¿Cómo empezó todo?

En los primeros cinco años -nació en el 86- La Cochera era un bar de desayunos, café y bocadillos orientados a los alumnos del instituto de enfrente. «Con el tiempo nos dimos cuenta que había que ofrecer algo distinto y nos apuntamos a un tapeo más vanguardista», explica César Gordillo, propietario junto a Teresa. Así, empezaron con las conservas de alta calidad y a raíz de ahí se fueron metiendo en la cocina con la intención de servir tapas con buenos productos y una cuidada presentación. «Fuimos pioneros en Alcalá, más allá de aliños y montaditos apostamos hace veinticinco años por un tapeo de calidad y bien vestido, y nos hemos mantenido en esa línea».

¿Qué encontramos en su carta?

Las tapas son el referente de este establecimiento, como decíamos, siempre buscando la calidad del producto y fórmulas atractivas a la vista. Además, los flamenquines y los San Jacobos tienen aquí un punto de favor puesto que César es cordobés.  «Últimamente, además, estamos incorporando en el día a día guisos tradicionales con una pizca de gracia más como el fideuá, un guiso marinero, revueltos o garbanzos con bacalao, por decir algunos».

Precio por persona

Para tapear el precio ronda entre los 10 y 15 euros.

Horario

De 13:30 a 16:30 y de 20:30 a 00:00.

Dirección

Profesora Francisca Laguna, 6.

Teléfono

955334892.

¿Qué proponen?

Dos sugerencias del día: el risotto de boletus y el revuelto de ortiguillas con aguacate.

¿Cómo empezó todo?

Bernardo abrió el Bar Bernardo en el 86 muy cerca de donde ahora se encuentran. Al poco se trasladaron al número 39 de la calle Silos en lo que por aquel entonces era un pequeño local bajo el nombre El Rincón de Bernardo. Poco a poco fueron añadiendo comedores, el primero en el 96 y el conocido como la Cueva de Toleana en el 2002, un comedor al estilo de una de las tantas cuevas que hay en la ladera del castillo. Hoy día es Toni, el hijo, quien está a cargo de este restaurante en el que ha introducido tapas modernas sin olvidar la cocina tradicional que lo ha caracterizado, como los arroces o los guisos caseros.

¿Qué encontramos en su carta?

La oferta gastronómica de Bernardo es muy variada. Ofrecen carnes, pescados y arroces. Cuentan con dos cartas, una para el restaurante y otra de tapas. «Hay mucha variedad de tapas, entre 30 y 40», explica Toni Araujo. «Intentamos siempre que el genero sea de calidad y elaborarlo lo menos posible». Los arroces siguen siendo uno de sus puntos fuertes. Lo tienen caldosos, secos y al horno. Hay arroces de caza, marineros… y en esta época de Cuaresma recomiendan el de pulpo y el de bacalao fresco.

Precio por persona

«En el restaurante los precios oscilan entre 30 y 35 euros por persona. En la zona de tapas, de 10 a 20 euros», apunta Toni.

Horario

De martes a domingo de 13,30 a 17,30 y de 20,30 a 0,00.  Domingo al mediodía y lunes cierran por descanso.

Dirección

Silos, 39.

Teléfono

955680691.

¿Qué proponen?

«A mí me gusta empezar siempre con platos fríos, como el tartar de tomate de kumato sobre un salmorejo de remolacha, con ventresca y taquitos de jamón», sugiere Toni. «Luego, la coquina de la zona de Huelva. Y de arroces, el más tradicional es el de perdiz, pero no me perdería el de rabo de toro», concluye.

¿Cómo empezó todo?

Antonio, actual propietario de El Carrito, es ya la tercera generación de una saga familiar. El nombre del negocio no es casual. Hace más de 60 años que su abuelo, Rafael, vendía comidas y bebidas por Sevilla en un carrito ambulante. Fue prosperando hasta que compró una casita en Alcalá donde amplió el negocio instalando una barra y dando comienzo a la Venta El Carrito. Hoy día es un restaurante donde sirven carnes de calidad con una bodega que cuenta con más de 45 referencias.

¿Qué encontramos en su carta?

Fundamentalmente carne a la parrilla. La fama se la dan el cordero lechal asado al horno y la carne de vacuno a la parrilla en diferentes variedades, destacando la de vaca vieja, aunque siempre tienen fuera de carta dos o tres tipos de vacuno de otras razas y variedades. Aparte de la carne, que es lo busca su clientela, tienen variedad en los entrantes como los revueltos con huevo de corral -de trigueros, de morcilla de Burgos, de chistorras salmantinas….- o las habichuelas confitadas con jamón.

Precio por persona

Depende de la pieza de carne o la botella de vino que se pida, pero puede rondar los 35 o 40€.

Horario

De lunes a jueves de 13:00 a 18:00. Viernes y sábado de 13:00 a 18:00 y de 21:00 a 00:00.

Dirección

En la urbanización El Sercado, la salida 12b en la Autovía Sevilla-Málaga.

Teléfono

954100597.

¿Qué proponen?

El cordero lechal y la carne de vaca a la parrilla son los platos estrella, pero Antonio también apunta otra propuesta. «La cecina de vaca en su estado puro, cortada al momento con almendras sale muchísimo, casi igual que el jamón de bellota o más», indica. También la cecina con foie de pato y reducción de Pedro Ximénez, de elaboración propia.

¿Cómo empezó todo?

Hace veinte años que los hermanos Sergio y Juan Fernández decidieron montar un negocio especializado en carnes a la brasa en un local de su padre en Alcalá de Guadaíra, debido a lo que disfrutaban en una venta parecida de Bollullos. El éxito lo mantienen tras los años debido, en gran medida, a la atención rápida y al precio. Para conseguirlo la comanda se toma en la barra y se sirve en la mesa tanto del salón como de la terraza.

¿Qué encontramos en su carta?

La carne a la brasa es su especialidad hecha en horno de carbón. También cuentan con pescado a la plancha  -el lenguado fresco o pez espada pueden ser una opción-, gambas, croquetas, chacina ibérica, montadito de lomo, pinchitos o el clásico cóctel de marisco.

Precio por persona

«Una buena carne a la brasa, con unas gambitas y dos bebidas puede salir por 24 euros la pareja», asegura Sergio.

Horario

De 13:30 a 16:00 y de 20:30 a 00:00.

Dirección

Duquesa de Talavera, 87.

Teléfono

955699702.

¿Qué proponen?

La ternera a la brasa es lo que más se pide. Se sirve con pimiento, una patata asada en el mismo fuego y una pieza de pan típica de Alcalá también tostado en la brasa con aceite y ajo.

¿Cómo empezó todo?

El nombre ya se le ha quedado corto a La Centenaria porque ya ha superado el siglo y medio. Esta confitería data de 1860 y el edificio que la alberga ha sido declarado de interés artístico. Un enclave adornado por unos azulejos, procedentes de la casa de cerámicas Triana Mensaque, que es ya su seña de identidad. En sus inicios La Centenaria ofrecía los productos de su obrador en lo que se llamaba salón de té, donde, en su mayoría hombres, se reunían para tomar vermut o té.

Quienes ahora lo regentan, José Antonio, Jesús e Isabel, son los hijos de Manuel Cabreja, quien con doce años entró como ayudante y terminó como propietario de una confitería histórica.

Tocino de cielo de La Centenaria / Rafa Sánchez

¿Qué encontramos en su vitrina?

Su pastelería no tiene ni colorantes ni conservantes y es elaborada en el obrador de la Centenaria, que conserva a pleno rendimiento su tradicional horno de leña abovedado. El tocino de cielo, la bizcotela rellena y las tortas de Alcalá son sus emblemas. «Vienen de fuera de Alcalá buscandolos expresamente», explica Jesús Cabreja, uno de los actuales propietarios.

Desde hace cerca de 40 años, la confitería cuenta con una cafetería donde tomar sus dulces y disfrutar del patio interno rodeado de lo míticos azulejos.

Precio por persona

Una caja de tortas de Alcalá para llevar cuesta 6,50€ y los dulces rondan 1,40€.

Horario

De lunes a domingo de 8,00 a 21,00.

Dirección

La original está en la calle Nuestra Señora del Águila, 66, aunque también cuentan con otra confitería con los mismos productos en la Avenida Escultura La Roldana.

Teléfono

955682928.

¿Cómo empezó todo?

La Confitería San Joaquín abrió sus puertas en la Plaza de Cervantes en 1946 para despachar los dulces que elaboraba en el obrador del sótano. Hoy día sigue respetando las recetas de entonces para sus dulces y además cuenta con una amplia cafetería donde tomar sin prisas sus pasteles. Estas mismas elaboraciones se pueden degustar también en la confitería con la que cuentan en la Plaza de Santa Ana, donde con el buen tiempo triunfa su amplia terraza.

¿Qué encontramos en su vitrina?

Las figuras de nazarenos acompañan en estas fechas de Cuaresma a torrijas y pestiños  en los escaparates que dan para la Plaza de Cervantes. Al igual que en época navideña los clientes demandan sus famosos mantecaditos de viena, de una textura mucho más suave de lo que estamos acostumbrados. Pero durante todo el año los protagonistas indiscutibles son las bizcotelas rellenas y las tortas de Alcalá. Aparte, hay un gran abanico para elegir tanto para tomar en su cafetería como para llevar a casa, desde las pastitas de té, las tortas de polvorón, los casquiñones o las palmeras, todo de elaboración propia, también las tartas que se pueden pedir personalizadas por encargo.

Precio por persona

Una caja de 12 bizcotelas tiene un precio de 29.50€ y la caja de tortas de Alcalá 7€.

Horario

De lunes a domingo de 8.30 a 21.00.

Dirección

Plaza Cervantes, 4 y Plaza Santa Ana, 5.

Teléfono

955682920.