Ponche segoviano

El bizcocho: Batimos en un robot seis yemas y tres claras durante quince minutos. Reducimos la velocidad de batido y añadimos con cuidado la maicena. Engrasamos un molde rectangular, vertemos en él la mezcla y lo cocemos en horno al baño María durante quince minutos.El almíbar: Preparamos un almíbar disolviendo en un cazo pequeño el azúcar en el agua; añadimos la cáscara de limón y lo dejamos cocer diez minutos. Bañamos el bizcocho con el almíbar.La crema: Hacemos un almíbar a punto de hebra floja con el azúcar y los 50 ml. de agua. Batimos las yemas en un cazo de fondo grueso, añadimos el almíbar y acercamos al fuego sin parar de mover hasta que espese. Partimos el bizcocho a la mitad (con el cuchillo horizontal), ponemos crema, montamos una parte sobre otra y cubrimos con más crema.El mazapán: Amasamos la almendra molida con el azúcar glass y la clara de huevo. Trabajamos como si fuese una masa, ayudándonos si es preciso con algo de agua. Extendemos la masa hasta que tenga medio centímetro de espesor y cubrimos la tarta, recortando los bordes que sobren.Acabado del plato: Espolvoreamos con azúcar glass y quemamos con un hierro incandescente dando forma de rombo.

Si lo deseas, puedes aromatizar la crema con vainilla o canela.

Algunos de los ingredientes que destacan en la elaboración de este tradicional postre son los huevos, las almendras y el azúcar.Los huevos van a aportarnos una buena cantidad de proteínas de alto valor biológico, así como vitamina A,D y E y minerales como el fósforo, el hierro, el yodo y el selenio.En esta receta también encontramos una importante cantidad de almendra molida. Este fruto seco destaca por su elevado contenido en grasa insaturada, la cual disminuye los niveles de colesterol en sangre, y nos ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.Debido a la elevada cantidad de azúcar empleada, este pastel no está indicado para personas diabéticas.