Liebre guisada con canela

Troceamos la liebre y la ponemos en un recipiente cubierta con el vino blanco. La dejamos macerar durante tres horas.Pasado ese tiempo, ponemos aceite en una cazuela. Cuando esté caliente, echamos los trozos de liebre escurridos del vino. Añadimos la cebolla picada y el tocino en trozos. Rehogamos, a fuego medio, durante 15 minutos.Añadimos una cucharadita de canela, unos granos de pimienta, los clavos de olor, los diente de ajo laminados y el vino donde había macerado la liebre. Ponemos sal al gusto, tapamos la cazuela y dejamos cocer, a fuego lento, hasta que la liebre esté tierna.

Para que la carne no quede demasiado seca, podemos añadir a la cocción un poco de manteca de cerdo.

La carne de liebre, al igual que la del conejo, es rica en proteínas con un bajo contenido en grasas. Aporta vitaminas del grupo B y también es rica en calcio y hierro. Sin embargo, su nivel de purinas es alto, por lo que su consumo excesivo aumenta los niveles de ácido úrico en la sangre.