Las cenas rápidas que puedes hacer con una tortilla francesa para ahorrar tiempo
¿Tienes poco tiempo para cocinar y necesitas preparar cenas rápidas? Aquí te damos ideas que puedes hacer con una tortilla francesa. Así ahorrarás tiempo y comerás platos ricos y sanos.
De todos es conocida la versatilidad del huevo en la cocina. Se pueden comer huevos de muchas formas diferentes, hay recetas para todos los gustos. Pero es cierto que si hay una elaboración con huevo sencilla y rica, ésa es la tortilla francesa.
Lo único que tienes que hacer es batir los huevos, ponerlos a punto de sal y, ¡a la sartén! En menos de 5 minutos tendrás el plato preparado para llevar a la mesa y disfrutar.
Pero no sólo eso. Una vez tengas tu tortilla francesa lista, puedes utilizarla también como ingrediente para otras elaboraciones igualmente sencillas, saludables y exquisitas. Por ejemplo, puedes preparar una ensalada de pasta con pimientos, maíz, surimi, tortilla y aceitunas. Con este plato tendrás solucionada la comida para uno de esos días con poco tiempo.
Sin embargo, ahora nos vamos a centrar en las cenas. Es el momento del día perfecto para incluir huevo en el menú, porque es el alimento perfecto para dormir mejor.
Así que, toma nota y ponte manos a la obra si quieres beneficiarte de todo lo bueno del huevo con estas 7 ideas para hacer cenas rápidas con una tortilla francesa.
Prepara este plato en poco tiempo o para cenar si no tienes muchas ganas de trabajar demasiado en la cocina después de llegar a casa. Seguro que te gusta.
Lava bien los tomates y quítales la piel y las pepitas. Córtalos en trocitos. Bate los huevos con una pizca de sal y un poco de perejil picado. Incorpora los tomates y mezcla bien. Pon la mezcla en una sartén con un poco de aceite de oliva y cuaja la tortilla por las dos caras.
Para hacer esta tortilla fácil y rápida, se baten los huevos hasta que estén espumosos, se mezclan con el pan rallado, la leche y el perejil.
Salamos al gusto y cuajamos en una sartén pequeña para que quede compacta. Se sirve templada, acompañada de salsa al gusto.
Para disfrutar del sabor a mar, preparamos esta tortilla con gambas y mejillones. Pelamos las gambas y las añadimos a una sartén con un poco de aceite y los ajos picados. A continuación, ponemos los mejillones. Damos un par de vueltas para que se hagan. Añadimos un poco de sal y por último los huevos batidos.
Con cuidado vamos dando la forma de tortilla y cuando esté hecha al gusto, retirar y servir. Decorar con unas gambitas en la parte superior. También puedes añadir a esta tortilla cualquier otro ingrediente del mar que te guste.
¿Te apetece una tortilla de patatas pero tienes poco tiempo o pocas ganas de cocinar? Prepárala con unas patatas fritas de bolsa y la tendrás lista en un momento.
Batimos los huevos en un bol y añadimos una pizca de sal (no mucha porque las patatas ya están saladas). Abrimos un pequeño agujero a la bolsa de patatas y la estrujamos hasta que se partan todas. Las añadimos al huevo batido, mezclamos bien y dejamos que se hidraten. Calentamos el aceite en una sartén y volcamos la mezcla. Cocinamos hasta que se cuaje la tortilla por ambas caras.
Corta la panceta en láminas y dórala a la plancha para que quede lo más crujiente posible. Cuando no esté demasiado caliente, córtala en trocitos y reserva.
Bate los huevos con una pizca de sal y añade la panceta. Haz la tortilla en una sartén antiadherente con un hilo de aceite de oliva para que no se pegue. Cuando esté bien cuajada por ambos lados, retírala del fuego y sirve bien caliente.
En una sartén con unas gotas de aceite saltearemos las espinacas con los dientes de ajo bien picados.
Cuando tengamos bien salteadas las espinacas, vertemos éstas en un bol y las mezclamos con los huevos bien batidos. Elaboramos una tortilla con esta mezcla en una sartén con el fuego no demasiado fuerte.
Podemos acompañar esta deliciosa tortilla con unas lechugas verdes y unos trocitos de tomate aliñados. Y para darle un aspecto y sabor más atractivo para los pequeños, podemos añadir unos trocitos de quesito fundente a la mezcla de espinacas y huevo.
Esta tortilla constituye un plato muy sabroso, ideal para incluir en cenas. Además, representa una buena manera de hacer que los más pequeños consuman huevos, ya que al ser elaborada con salchichas, el plato va a resultar más atractivo para ellos.
Retira la piel que envuelve a las salchichas y pícalas con la ayuda de un cuchillo hasta que queden bien finas. Calienta una sartén con aceite con aceite de oliva y sofríe en ella las salchichas picadas, hasta que queden bien cocinadas. Bate los huevos e incorpórales las salchichas ya cocinadas. Mezcla bien y vierte el resultado en la misma sartén donde sofreímos las salchichas. Espera a que cuaje y, con la ayuda de un plato o «vuelvetortillas», le damos la vuelta para terminar de cuajar por la otra cara. Servir al momento.
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