El zumo para limpiar el hígado de forma natural: es ideal para personas con colesterol

Preparado con ingredientes sencillos y asequibles, este zumo natural también viene bien para hacer la digestión y puede ayudar a mejorar los niveles de colesterol.

Tomarlo con regularidad es una manera práctica de incorporar alimentos beneficiosos a la dieta diaria sin recurrir a soluciones artificiales.

El hígado es el gran laboratorio del cuerpo. Todo lo que comemos y bebemos pasa, de una forma u otra, por él. Si está sobrecargado, se ralentiza el metabolismo, aumenta la retención de líquidos, pueden aparecer problemas digestivos y suben los niveles de colesterol malo (LDL).

Aunque los zumos no hacen milagros, incluir en nuestra dieta ingredientes con propiedades depurativas y antioxidantes puede favorecer el funcionamiento hepático. Y si, además, estos ingredientes ayudan a reducir el colesterol y son fáciles de encontrar, estamos ante una receta perfecta.

Si hablamos de un zumo casero de remolacha, manzana verde y limón, repasemos los beneficios de sus ingredientes.

En el caso de la remolacha, es uno de los alimentos más recomendados para potenciar las funciones del hígado. Este tubérculo contiene betaína, un compuesto que ayuda a eliminar toxinas y grasa acumulada en el hígado. También es rico en antioxidantes, que protegen las células del daño oxidativo.

Su color intenso alegra las recetas con remolacha y las bebidas que se preparan con este ingredientes tan saludable. Pero, además, es señal de su alto contenido en pigmentos vegetales que actúan como antiinflamatorios naturales.

A todo ello se une que la remolacha contiene fibra y aporta saciedad. Por lo tanto, es perfecta para dietas de control del colesterol.

La manzana verde es otro de los ingredientes estrella en este zumo. Su contenido en pectina, un tipo de fibra soluble, hace que mejore la digestión, ayuda a eliminar residuos del sistema digestivo y reduce los niveles de colesterol.

Además, esta fruta tiene un efecto ligeramente diurético y aporta un sabor fresco que equilibra muy bien el aporte de la remolacha.

Comer manzana verde cruda ya es beneficioso, pero en zumo conserva gran parte de sus propiedades, sobre todo si se utiliza con la piel.

El zumo de limón es un clásico en cualquier preparación depurativa. Es rico en vitamina C, antioxidantes y ácidos naturales, así que estimula la producción de bilis, lo que mejora la digestión de las grasas.

También favorece la función del hígado al activar sus enzimas y ayuda a equilibrar el pH del organismo.

Un chorro de limón exprimido en el zumo, además, intensifica el sabor del preparado y lo hace más refrescante.

Para preparar este zumo depurativo sólo necesitas 1 remolacha pequeña cocida o cruda (si tienes batidora potente), 1 manzana verde sin pelar, el zumo de medio limón y un vaso de agua fría.

Lava bien todos los ingredientes, trocea y bate hasta conseguir una mezcla homogénea. Puedes añadir unas hojas de menta fresca si quieres darle un punto aromático o un poco de jengibre para potenciar su efecto antiinflamatorio.

Lo ideal es tomarlo en ayunas, unas tres veces a la semana. Eso sí, recuerda que este zumo no puede sustituir ninguna comida.

Utilízalo como parte de una dieta equilibrada orientada a mejorar la salud hepática y reducir el colesterol. No es una solución mágica, pero sí un apoyo importante para cuidarte con una alimentación saludable.