GASTROTEST
Miguel Alba, Los Alba: “Confío mucho en esos comercios de barrio que me surtirán de buen producto”
Su restaurante ha sido sinónimo de buena cocina tradicional, de guisoteo y cuchara, durante varias décadas. Hablamos en pasado porque Los Alba cerró hace poco más de un mes. Miguel Alba, al frente del negocio, ha dado el paso hacia la jubilación no sin antes compartir con nosotros algunas de sus debilidades en lo que a gastronomía se refiere.
C. Mateos/ M. Sánchez
El 26 de julio cerraba sus puertas Los Alba , en Teatinos. Miguel Alba, al frente del negocio, lo tuvo claro cuando sus médicos le dijeron que era hora de soltar el mandil y empezar a cuidarse. “Tuve unos achaques de salud y eso ... fue lo que finalmente me llevó a la jubilación ”, nos comenta. Lo hace entre risas, siempre con una actitud positiva y atenta cuando hemos visitado su bar. Sin lugar a dudas un ‘adiós’ que deja a muchos sin su favorito para desayunar o sin esa apuesta segura para tomar un menú del día con garantías…
Hablamos ahora con Miguel desde su casa, por la zona del Palo, por la carretera de Olías, una vivienda que le permite desayunar cada mañana con las mejores vistas, con el Mediterráneo en el horizonte . Su hijo, Miguel, se planteó tomar el testigo pero sobra decir lo complejo que es –y cada vez más– gestionar un negocio de hostelería, así que se ha decidido a cambiar su rumbo profesional. Tanto él como la familia Alba sigue disfrutando de los guisos y la cocina del cabeza de familia, que desde hace años es un asiduo en los medios de comunicación regalando sus recetas y sus maneras a los fogones.
Esas apariciones en televisión y redes le han dado tablas a Miguel, ojo, que va camino de convertirse un auténtico ‘influencer’ , ¿eh? Se lo comentamos y se echa a reír. ‘Ey, que no es para tomarlo a broma’, le decimos. Solo hay que echar un vistazo a las cifras de seguidores: 172.000 en Facebook, donde comparte recetas de cocina, y 10.300 followers en Instagram.
Estos nuevos medios se han convertido así en una especie de “trabajo”, señala él mismo. “Una manera de entretenerme”, añade. Han sido más de 40 años dedicado al sector y ahora es momento de retomar viejos hábitos y descubrir nuevas aficiones. Nosotros lo seguimos desde ya, ¿y ustedes?
– Si pudiese desayunar con calma por la mañana, ¿dónde lo haría?
– Probablemente en casa. Han sido muchos años dedicando todo mi tiempo y esfuerzo al negocio así que esto de poder arrancar el día aquí, en mi terraza, con estas vistas al mar que tengo, es un privilegio. Mi café con leche, pan calentito con aceite de oliva virgen extra, un poco de jamón o salchichón, que me encanta, o igual ir comiéndome a pellizquillos un trozo de bacalao.
– Una carnicería, pescadería y frutería de confianza…
– Para mi este punto es complicado, porque llevo muchísimo tiempo en el bar, trabajando, y prácticamente sin parar en casa. Ahora lo que suelo hacer es comprar en una gran superficie que lo tengo todo a mano e igual para mi es más cómodo. Tengo pendiente darme una vuelta por El Palo, que me pilla cerquita, y acercarme a esas tiendas de barrio, de siempre. Confío en que esos comercios seguro me van a surtir de buen producto. Hay una carnicería en El Palo, la de Antonio, que ya tengo claro que va a ser de las mías…
– Una tienda gastronómica o algún puesto donde encontrar ese algo especial que buscas para la cocina…
– El Reloj. Es de esos sitios a los que iba siempre que necesitaba algún tipo de especias para cocinar.
– Bar de barrio en el que tomar un aperitivo con los amigos.
– Sigo por El Palo para ir a un lugar que es de mi familia, a los Hermanos Alba. De lo mejor. Un pinchito, unas gambas, no se, cualquier cosa está en su punto y para mi es especialmente satisfactorio, pues de camino visito a los míos.
– Un restaurante especial para invitar a comer a la familia.
– Para ir en familia soy sencillo. Igual la Venta El Túnel, que es para todos los públicos, o por la Axarquía, que hay cada vez mejores restaurantes. El merendero El Pollo, que está en Benajarafe, es de mis favoritos.
– Un sitio diferente para cambiar de tercio.
– Tal vez algo sencillo, de tapeo, para ir de informal, como Casa Lola, en el centro de Málaga. Tengo que visitar los sitios que se han ido abriendo.
– ¿Un pequeño vicio confesable gastronómicamente hablando?
– Un postre que me encanta, el tocino de cielo. Es una debilidad. Realmente cualquier pastel o comida dulce. El coulant de chocolate, que es también de mis preferidos. La verdad es que en el restaurante me encantaba preparar cosas de estas, un pudding de chocolate, la tarta de queso, pero al final me faltaba tiempo. Teníamos mucha clientela y era un no parar.
– Un restaurante ‘de lujo’ al que volver.
– Me decantaría por el establecimiento que tienen Los Mellizos en Sancha de Lara. Es perfecto para alguna ocasión en la que nos hemos podido escapar. Ahora tendré más tiempo.
– ¿Café o copa?
– Soy de café. Para la sobremesa lo prefiero solo, ¿eh? El café con leche lo dejo para el desayuno. Igual una cerveza en el aperitivo pero no soy nada de copas.
– Un chiringuito al que ir en verano.
– Los Cuñaos, que lo tengo cerca.
– ¿Qué te gusta preparar en casa cuando tienes invitados?
Una buena paella, preparar la barbacoa, con carne de ternera, pinchos. Antes unos aperitivos, igual un queso en aceite…
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