Esperanza Peláez: “¿Para cocinar? Siempre algo de cuchara. Me encantan los guisos y los reivindico cuando puedo”

Esperanza, que es protagonista de este ‘Gastrotest’, es una periodista todoterreno , compañera de Diario Sur, responsable de un suplemento gastronómico que seguimos muy de cerca en GURMÉ por la calidad de sus contenidos, ‘Málaga en la mesa’ . A su trayectoria profesional y su buen hacer como comunicadora hay que unir su calidad humana, algo en lo que inciden quienes han podido conocerla bien por motivos laborales o por razones personales.

Nos atiende entre idas y venidas por temas profesionales, con San Sebastian Gastronomika de por medio, y ya les adelantamos que, si siguen leyendo, encontrarán alguna que otra referencia interesante si gustan de la cocina y del mundo de la gastronomía .

Suelo desayunar en casa normalmente. Cuido mucho mi alimentación y siempre tengo pan que compro en buenas panaderías que tengo cerquita. El de centeno lo compro a El Colmenero . Los pitufos los suelo traer de La Canasta y luego otros panes y las baguettes de 25 Degrés . Como ves, normalmente hay variedad en casa. Lo tomo con tomates de Extiércol (Cuevas del Becerro), un proyecto de agricultura ecológica y biodinámica que apuesta por darle trabajo a la población joven, para que no tengan que irse de la zona. Es una iniciativa muy bonita. Y bueno, el tomate por supuesto con aceites de oliva. Me encanta tener distintos e ir alternando, jugando con ellos. Ahora están entre mis favoritos el Único de Mondrón y el Selección Especial Molino de Monda . Para los desayunos no me gustan picantes, no soy de tomar fuertes para este momento. Otro imprescindible es el requesón de El Arquillo . Ah, y para beber soy de tés. Los compro en Golden Tips , que está en calle Especería y son de gran calidad.

Esto en casa. Cuando estoy fuera a veces quedo por temas de trabajo en Matiz . Tienen un té de buena calidad y es un sitio agradable.

Para el pescado tengo claro que de lo mejor es el producto que manejan en Matías Soler, en el Mercado del Carmen . Tienen un compromiso real con la materia prima de proximidad, cuidando la trazabilidad. Me muevo en bici así que realmente aprovecho para pasar por el mercado de El Molinillo y por Atarazanas . Es como una manía. Soy de echarle un ojo a los puestos y ver qué hay en cada momento, por temporadas.

Respecto a la carne, es difícil decirte algún lugar porque soy poco carnívora. Por motivos laborales sí tomo, en comidas fuera, pero en casa no es lo normal. Si tengo que comprar algo de carne igual voy al Mercado Central o en alguna carnicería de mi barrio pero es algo excepcional.

En cuanto a la fruta, en este caso me quedo también por mi zona. Tengo a unos pasos Frutería Pepe , en la calle Ferrándiz, que es un comercio tradicional, de los de siempre, que trae la fruta de Alhaurín. También a Extiércol , que ya te comentaba, y luego está Ecomilanés , en calle Victoria, una tienda de productos bio que frecuento y que es estupenda. Diría que con estos tres me suelo abastecer bien.

En el caso de las especias no hay dudas: El Reloj. Tienen un buen comino y prácticamente todas las especias que traen de Marruecos son de calidad. El Reloj es la marca propia de La Tienda de las Especias . Añado , que es online. Luis Alcázar es la persona que la lleva y es un auténtico apasionado de lo que hace. Lo explica todo súper bien y el producto que tiene es de calidad.

En el caso de los vinagres, otro imprescindible en mi caso porque soy una friki de este producto, me dirijo a Narbona Solís (web). Uno de los que más me ha sorprendido es el vinagre de vino reserva Vinagre del Condado de Huelva . Y si voy a Córdoba, por ejemplo, me traigo alguno de Montilla-Moriles. Siempre tengo algún vinagre especial en casa.

Ah, aprovecho para citar el vinagre de Módena de Acetaia Gambigliani Zoccoli . Esta es una familia que elabora un vinagre dentro de la DOP y fueron ellos los que nos descubrieron con Kilómetro Cero las posibilidades de ese vinagre como condimento.

Bar Nerva , lo tengo claro. No voy todo lo que me gustaría pero está cerquita y siempre que puedo me acerco, tanto para desayunos como sobre todo en la cuchara, que la trabajan fenomenal. Está su ensaladilla rusa, que es una maravilla, y luego el trato que dan al cliente. Es un lujo tener un sitio como este.

Es difícil elegir porque hay muchos restaurantes maravillosos pero creo que los llevaría a Arte de Cozina . Mis padres son amantes de la cuchara y hay determinados platos que han comido en el establecimiento de Charo (Carmona) y les han encantado. Disfrutaron muchísimo. Piensa que en casa se ha cocinado muy bien, hemos comido genial. Mi madre es una gran cocinera y al final eso hace que valoren especialmente sitios como este.

Pues Mura Mura podría ser. Creo que lo que hace Carmine Guarino tiene un gran mérito. Yo tengo mucho vínculo con Italia y voy con cierta frecuencia y Carmine está innovando dentro de la cocina italiana. Su propuesta tiene unas raíces muy definidas, demuestra un gran respeto por la tradición, aun corriendo ciertos riegos en la cocina. Está también esa mirada que tiene en relación a otros aspectos importantes en hostelería. Por ejemplo, infusiona la pasta en frío para ahorrar agua… Hay mucho detrás de Mura Mura.

Ufff. Fíjate que nunca he comido chucherías o snacks. No me han gustado. Ni siquiera de pequeña los tomaba. Pero como capricho sí citaría la tarta de manzana de Daza , que es deliciosa. El hojaldre perfecto, está riquísima. En casa mi padre preparaba una tarta de manzana y bromeábamos con él sobre si era mejor que la de Daza o no, pues se asemejan. La verdad es que… ¡Gana la de Daza! La de mi padre es la segunda mejor tarta de manzana que he probado (risas).

Ah, que se me olvidaba, que otra cosa que me tienta siempre es el helado de tutti frutti de Lauri , que no lo perdono.

A Bardal , con Benito Gómez.

Té.

No soy muy de chiringuitos, ¿eh? Igual podría responderte con un lugar como Chinchín Puerto .

Depende del día, no podría decirte ahora mismo. Probablemente sería algo de cuchara, porque me encantan las cazuelas. Un buen potaje, un gazpachuelo. Estos guisos los defiendo y reivindico cuando puedo pues han sido grandes olvidados de la cocina malagueña dentro de la alta cocina.