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Las mejores tartas de queso en Málaga: tiendas y pastelerías especializadas
Málaga vive un auténtico idilio con las tartas de queso y cada vez son más los locales especializados en este postre. Te contamos dónde probar algunas de las más buscadas
7 Cafeterías de especialidad en Málaga que deberías probar
Cristina Torres
Sevilla
El boom de las tartas de queso no pierde fuelle en Málaga. En 2025 sigue latiendo con fuerza y suma adeptos cada día. El postre más universal se ha convertido en icono de restaurantes, pastelerías y hasta locales especializados que versionan la ... receta hasta el infinito.
En los últimos años, las cheescake han encontrado una nueva vida como un postre altamente fotogénico, con creaciones innovadoras que han disparado su popularidad gracias a las redes sociales, en especial a los vídeos en Instagram y TikTok.
En Málaga, este boom ha impulsado a negocios de toda la vida a perfeccionar sus recetas y, al mismo tiempo, ha dado alas a proyectos centrados en exclusiva en este postre. El resultado: una oferta tan amplia como tentadora. Aquí repasamos ocho tiendas especializadas en tartas de queso para endulzar tu día a día en Málaga capital y su provincia.
1989 Cheescake Room
Junto al Museo Carmen Thyssen (C/ Compañía, 9) se esconde uno de los rincones más golosos del centro histórico. Este pequeño obrador trabaja exclusivamente con tartas de queso, elaboradas de forma artesanal cada día y servidas en porciones listas para llevar. La vitrina cambia según la temporada y combina clásicos como la horneada tradicional con sabores que arrasan en redes: pistacho, Lotus, Kinder, Nutella o brownie con caramelo salado. Una parada imprescindible para quienes buscan un capricho dulce durante el paseo por Málaga.
La Cheesequería
Si en Málaga hay un proyecto especializado en tartas de queso que ha triunfado, ese es La Cheesequería. Lo que empezó en plena pandemia como un proyecto casero de Ricardo Álvarez, se ha convertido en un obrador de referencia con locales en barrios como El Limonar, Centro, El Palo, Teatinos, Plaza Mayor, e incluso, ha llegado a Granada, con próximas aperturas en Vialia y Plaza Mayor.
Su carta es un festival para los amantes de la tradicional de queso: desde versiones clásicas a la de payoyo, Idiazábal ahumado o La Viña, hasta opciones atrevidas como pistacho, lemon pie, mango-maracuyá o caramelo salado.También tienen una línea más golosa pensada para los más jóvenes y los nostálgicos: Kinder, Lotus, Happy Hippo, Filipinos o Kit Kat.
Entre todas, la de queso payoyo y la de pistacho se han convertido en auténticos iconos para su clientela fiel, que cada semana pasa por el local en busca de nuevas combinaciones. La Cheesequería ha conseguido hacer de un postre clásico una experiencia siempre cambiante y sorprendente.
Seixis
Abierto este mismo año en la calle Antonio Soler (Huelin), este obrador especializado en tartas de queso ha conquistado a base de cremosidad y sabores virales. Tras el proyecto están tres nombres bien conocidos en la hostelería local: Gottan Grill, Dak Burger y K-Chopo.
Su vitrina ofrece propuestas que van desde el pistacho de Bronte hasta Lotus o Raffaello, con un punto goloso y fotogénico que ha arrasado en redes sociales.
Además de porciones tradicionales, también trabajan formatos mini que invitan a probar varios sabores en una sola visita. El local sorprende por su estética, más cercana a una galería contemporánea que a una pastelería clásica, reforzando la experiencia visual de un postre que ya es tendencia en la ciudad.
Las tartas de la madre de Cris
Nacida en Granada y convertida en un auténtico fenómeno repostero andaluz, La Tarta de la Madre de Cris también tiene su propio rincón en Málaga, en plena calle Granada, 56. La historia de este pequeño imperio comienza hace más de una década en el garaje de Pilar Molina, y hoy sus recetas artesanas siguen marcando tendencia allá donde llegan.
Aunque la versión clásica es la más demandada, su vitrina suele incluir opciones más atrevidas como la de queso azul, brownie, dulce de leche, zanahoria o tres chocolates.
Una parada segura en el corazón del centro para quienes buscan una receta casera, con ese punto goloso y a la vez equilibrado que ha hecho de esta marca una de las más reconocidas de Andalucía.
C de Cheescake
Si lo tuyo es la variedad, C de Cheesecake es parada obligada. Este obrador especializado despliega una carta larguísima en la que conviven recetas clásicas con guiños más atrevidos. Puedes encontrar desde la intensidad del queso payoyo hasta versiones golosas que hacen las delicias de los más dulceros: Oreo, Kinder, Donuts, Lotus o Nutella, y otras más creativas como la de mojito o de pantera rosa.
Además de porciones y tartas enteras para llevar, en sus locales también se puede desayunar con calma, acompañando sus propuestas con café o bollería artesana. En la capital, la tienda de Teatinos es la más práctica para quienes no quieren salir del centro urbano, aunque también cuentan con espacios en Cártama y Benalmádena.
Yuzu Pastry (Fuengirola)
Un viaje directo al Japón más dulce sin salir de la Costa del Sol. En Yuzu Pastry, la repostería nipona encuentra su templo, y la cotton cheesecake es la gran protagonista: ligera, esponjosa y con versiones que van del clásico natural al matcha con chocolate blanco o al caramelo salado. Un bocado que seduce por su delicadeza y por esa textura casi aérea que la hace diferente a cualquier otra tarta de queso de la provincia.
El obrador, especializado en dulces japoneses como mochis artesanales, completa la experiencia con sabores originales —pistacho, mango con chocolate blanco, turrón-café o frutos rojos—, lo que convierte la visita en una auténtica escapada dulce. A apenas 30–35 minutos de Málaga en coche o tren, merece el viaje para quienes quieran descubrir otra manera de disfrutar del cheesecake.
Claus Bakery Cheescake Factory
En plena calle Atarazanas, frente al bullicio del mercado central, se encuentra Claus Bakery Cheesecake Factory, un pequeño obrador que ha hecho de la tarta de queso su seña de identidad. Aquí la receta clásica convive con versiones más juguetonas como la de payoyo con frambuesa o la banoffee, con plátano, crema y toffee.
También tienen un hueco para la icónica New York cheesecake, incluso en versión sin azúcar, y acompañan su oferta con bollería artesanal de corte americano. Una parada práctica y muy céntrica para merendar, cargar energía tras la compra en el mercado o simplemente darse un capricho dulce en el corazón de Málaga.
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