La Maceta

Este bar se abrió hace 13 años y ha pasado por diversas manos hasta recaer en las de Yulia Tatarintseva y su marido Antonio Sibaja , que se ocupan del local desde el 2015, hace seis años ya. Hay que recordar que La Maceta fue uno de los locales pioneros en Córdoba en poner tapa con la cerveza, y además centrar su oferta en ese concepto. Ahora estamos acostumbrados pero la tapa con la cerveza se generalizó (y hasta cierto punto) en la ciudad sólo a partir de los más crudo de la crisis económica, pasado el 2010, cuando muchos bares optaron por atraer así a la clientela, manteniéndose la costumbre en muchos sitios a partir de entonces, aunque a niveles muy inferiores por ejemplo a los de la vecina Granada.

Aunque Tatarintseva no tenía experiencia anterior en la hostelería, Sibaja llevaba toda la vida en este trabajo, y por ejemplo fue responsable del bar de la sede de la asociación de taxistas, del de la piscina del club Figueroa, el bar de Aucorsa o el restaurante que hubo en los baños árabes. La pareja decidió mantener el espíritu que vio nacer a este céntrico lugar: tapas de calidad y gratis con la consumición.

Y no son pocas tapas precisamente, sino más de 40 . Por una parte tienen una carta fija y por otra hay sugerencias diarias. Además puede están a disposición del cliente por si alguno solicita alguna pequeña variación posible en alguno de los platos, como por ejemplo un cambio de salsa o de guarnición.

Entre las tapas más representativas están el perrito macetero (mostaza, kétchup, salsa de pepinillos y cebolla crujiente), la hamburguesa argentina (carne de cerdo con salsa gaucha y cebolla crujiente) o la tosta de morcilla con cebolla caramelizada.

Como indica Tatarintseva el público más joven prefiere precisamente los perritos, hamburguesas o serranitos, la personas de mediana edad y más mayores prefieren opciones como la caballa con pimientos, palomenta o pinchitos.

Al margen de las tapas ofrecen platos para los que quieren comer con más consistencia una vez abierto el apetito, y pueden ir del risotto de setas a una lasaña, habitas baby, boquerones en vinagre, musaka de carne o pulpo a la gallega. En cualquier caso se varía constantemente.

A pesar de la aparente oferta informal cuidan mucho la oferta de vinos, que es también variada y aparece señalada en una gran pizarra. Tarantseva ofrece una buena noticia, por su experiencia observa que la juventud está recuperando el gusto por los vinos de Montilla-Moriles. Y con respecto a los vinos cuentan con una oferta: un magnum (botella de 1 litro y medio) con cinco tapas a elegir.

El horario es de 12:00 a 16:00, y por la tarde-noche de 20:00 al cierre. Cuentan con una pequeña terraza de tres mesas justo en la zona de mesas de en frente, a un lado de las de la taberna El Poema.