Vigo, una pesadilla en Navidad

La parte negativa es la imposibilidad no de dar un paseo por las diferentes calles, sino de dar un paso sin que la masa te lleve por donde ella quiere y uno no desea. Lo más parecido con una 'bulla' de la Semana Santa de Sevilla son las calles de Vigo.

Imposible circular en coche, terribles dificultades para obtener una plaza de aparcamiento prácticamente a cualquier hora del día, puestos de comida con un olor repugnante en plazas y calles céntricas, por no hablar de la dificultad de acceso para ambulancias y camiones de bomberos en caso de necesidad.

Salgo huyendo de semejante despropósito, mientras el alcalde es abucheado por los trabajadores de la empresa municipal de transportes y él responde con el signo de la victoria en sus dos manos. Al más puro estilo de los gobernantes bananeros.

Pero en estos días también he visto bolsas de comida donadas por particulares y reubicadas en sacos con las siglas y el anagrama del PSOE. Es una manera de disfrazar la miseria y convertirla en altruismo. Lo han copiado de China, de Cuba y de Rusia.

Me divierte mucho oír a Pilar Alegría contar que el Gobierno ha confirmado a Tezanos en su puesto gracias a los éxitos que ha cosechado, vaticinando la mayoría absoluta de sus clientes para los que trabaja.

Y a Yolanda le han plantado parte de sus secuaces. Se han ido con la música a otra parte, que le llaman Grupo Mixto. Las chicas defenestradas se han cansado de tanta prepotencia. Pero ya se sabe que Yolanda solo piensa en que llegue el día, en que pueda encaramarse a la presidencia y no estará tranquila hasta conseguirlo.

Otros que tienen y deben de tranquilizarse son los de Vox. Es necesario que no estén en permanente confrontación con quien no deben, que no busquen una notoriedad que no les corresponde porque, más pronto que tarde, les va a perjudicar.

Habilidad la de Rufián, que insiste en pedir la independencia de Cataluña por un lado, pero por el otro está sentado en un escaño y cobrando de la España opresora, alrededor de once mil euros mensuales. No sé si es un poco tener un enemigo a sueldo.

Vuelve a aparecer en mi vida un Galindo. Cuando yo era niño en casa de mis abuelos había un Galindo, que era un señor que no era nada, pero que servía para todo. Lo mismo se ocupaba de hacer gestiones como pagar facturas, ir al banco, buscar personal para la casa, sacar entradas, ir a la floristería… sin Galindo nada sería igual. Ahora España con Galindo estará más tranquila. Galindo nos va a colonizar. Nosotros no sabemos mucho de la situación de El Salvador. Yo sólo sé que es un país muy bonito, pero una vez que fui con mis padres a la capital, la abandonamos enseguida, porque mi padre decidió que le recordaba a Aranda de Duero en el 57.

Nadia Calviño parece que se nos va. María Jesús Montero debe de quedarse más tranquila, al igual que Yolanda Díaz. Pero la mas feliz es Nadia, porque va a ganar casi cuatrocientos mil euros sin pagas. Se acabaron la disparidades de criterio, los agobios y las malas caras.