La vida personal de Robin Le Normand: su edad, de dónde es y por qué juega con la selección española

El joven futbolista creció en una familia apasionada por el deporte. Su padre, Phillip fue entrenador en Tréglamus, mientras que su madre, Corinne, jugó baloncesto en el Avenir de Rennes. Además, tiene dos hermanos, Theo y Nora, con quienes comparte una estrecha relación y también se dedican al deporte.

Comenzó su carrera en las categorías inferiores del Stade Brestois, donde destacó por su disciplina y habilidades defensivas. En 2016, se trasladó a España para unirse a la Real Sociedad B, el equipo de reserva de la Real Sociedad. Su rendimiento en el equipo B fue impresionante, ganándose rápidamente la atención del primer equipo.

En 2018, Le Normand debutó con el primer equipo de la Real Sociedad en La Liga. Su primer partido fue el 26 de noviembre de 2018 contra el Celta de Vigo. Desde entonces, se ha consolidado como uno de los defensores más sólidos del equipo, acumulando numerosas apariciones en la máxima categoría del fútbol español.

Aunque nació en Francia, el joven de 27 años se siente profundamente conectado con España. Llegó a la Real Sociedad en 2016 y rápidamente se adaptó a la cultura y el idioma. En 2022, obtuvo la nacionalidad española, un hito que celebró con su familia y amigos en San Sebastián, y que hoy le permite jugar con La Roja.

Robin es un amante de la naturaleza y disfruta pasando su tiempo libre haciendo senderismo y explorando la naturaleza. Además, es un amante de la lectura, especialmente de libros de historia, y le encanta la gastronomía española, siendo la paella uno de sus platos favoritos.

También participa activamente en programas de caridad, colaborando con organizaciones que promueven el deporte entre los jóvenes desfavorecidos. Recientemente, se ha unido a una campaña para fomentar la educación y el deporte en zonas rurales de España.

La decisión de Le Normand de jugar en la Eurocopa con España, lo cual le está permitido por su doble nacionalidad, ha sido bien recibida tanto por sus compañeros de equipo como por los aficionados. Su solidez defensiva, combinada con su habilidad para liderar desde la retaguardia, lo convierte en una pieza fundamental del equipo de Luis de la Fuente.