La vida actual de David Meca: su nueva profesión, su blindada intimidad y la enfermedad que le llevó al éxito

Desde que se alejara del agua, su vida ha cambiado por completo, aunque sigue guardando una estrecha relación con el mundo del deporte. Hace apenas unas semanas, el recordman del Estrecho de Gibraltar y otros retos imposibles completaba «por orgullo personal» la fuga de Alcatraz un cuarto de siglo después de haberlo hecho por primera vez ─aunque en aquella ocasión lo hizo con grilletes en las piernas como protesta contra una sanción por dopaje─.

Pero ¿cómo es la vida actual de David Meca alejado de la natación? Te contamos todo sobre su trabajo actual lejos del deporte y su blindada vida privada.

Detrás del éxito inconmensurable de David Meca se esconde una importante historia de superación. La infancia del atleta estuvo marcada desde bien pequeño por los problemas de salud, que condicionaron su vida durante mucho tiempo. El nadador padecía asma y un grave problema de espalda, motivo por el que pasó años teniendo que recurrir a unos hierros en las piernas y a botas ortopédicas para poder corregir esta situación. Además, tomaba una medicación tan fuerte que sus dientes de leche estaban ennegrecidos y rotos.

Lo que no esperaban sus familiares que su gran obstáculo acabaría por convertirse en el causante de su gloria futura. Por prescripción médica, con apenas 5 años, Meca comenzó a practicar natación en una piscina de Sabadell y, aunque admite que a él no le gustaba ir y que lloraba todos los días, el deporte acabó siendo su gran salvación: no sólo le curó, sino que le sirvió para encontrar definitivamente su gran pasión en el mundo.

Así lo acreditan sus más de cien títulos internacionales en su brillante palmarés y la extensa lista de hazañas que cumplió durante sus años como profesional. Entre las más recordadas, la fuga de Alcatraz nadando con grilletes, los récords en el Estrecho de Gibraltar (consiguió batir el récord mundial en 2 horas y 29 minutos), el trayecto a nado de la península a Baleares o el de ser el primer peregrino en hacer el Camino de Santiago a nado.

A pesar de ello, no todos los momentos de su carrera deportiva han sido fáciles para Meca. En 1999, el español fue sancionado cuatro años por dopaje tras dar positivo en nandrolona después de la prueba de la Copa del Mundo de larga distancia. «Pensé que era una broma. Recorrí los mejores laboratorios del mundo para que me examinaran y demostrar que no tenía sustancias en mi cuerpo. Tardaron tres años en darme la razón», recordó tiempo después.

La natación no sólo ha sido su pasión, sino que también le ha permitido conseguir un futuro laboral más allá del agua. Tras ganar el campeonato de España con 18 años, el deportista pudo obtener una beca deportiva para estudiar Arquitectura en Estados Unidos. Un mundillo al que ha dedicado sus esfuerzos tras retirarse de las competiciones deportivas.

A sus 50 años, David tiene su propia empresa de construcción en la que trabaja como arquitecto y que se dedica a restaurar viviendas para ponerlas de nuevo en el mercado. «Una vez retirado, cogí las riendas de la empresa de construcción que tenía la familia. Hacemos solo una obra al año. Compramos propiedades, las restauramos y luego las alquilamos o vendemos. Por ejemplo lo hicimos con un hotel o una residencia de estudiantes», contó en el Diario AS.

Asímismo, Meca también se ha convertido en 'coach' motivacional y lo hemos visto habitualmente en algunas charlas de este tipo, demostrando cómo todo puede conseguirse con esfuerzo. Sumado al éxito logrado con la intención de despertar la motivación interna, también ha escrito dos libros: 'Swim, consigue lo que te propones' y 'Yo no temo a los tiburones'.

Respecto a su vida privada, pocos son los datos que se conocen de su pasado amoroso. El deportista admitió hace unos años que no había tenido pareja mientras que estaba en la élite de la natación y que, hasta que no se retiró, no comenzó a plantearse la posibilidad de una relación: «Soy muy familiar y ahora estoy viviendo con alguien... Disfrutando del momento, de la vida. Toca recuperar el tiempo perdido», contó en 2019 para 'LOC'. A pesar de esto, nunca ha ocultado su deseo de casarse y ser padre.

En cuanto a su físico, David Meca ha demostrado que la retirada del deporte profesional no es una excusa para descuidar su cuerpo. El nadador sigue entrenando a diario para mantener sus músculos e intenta cuidarse para «seguir marcando abdominales», algo de lo que presume en sus redes sociales habitualmente.