Tom Parker Bowles desmonta los mitos sobre su madre, la Reina Camila: «Nunca la he visto borracha»

Durante su intervención en el pódcast 'White Wine Question Time', presentado por la periodista Kate Thornton, Parker Bowles abordó sin rodeos algunos de los rumores que durante décadas han acompañado a la reina consorte. Entre ellos, la extendida creencia de que Camilla sería una asidua del gin-tonic y del tabaco. Nada más lejos de la realidad, según su hijo: «Contrariamente a la creencia popular, nunca la he visto borracha en mi vida. No bebe ginebra, nunca lo ha hecho», declaró.

Con la naturalidad que le caracteriza, Tom precisó que su madre «nunca» ha bebido ginebra, una bebida que, según él, forma parte de un mito que se alimentó durante años en la prensa británica: «Ese tipo de mito persiste, ¿no? Que le gusta tomarse un gin-tonic con un cigarrillo», comentó Thornton durante la charla. Tom, por su parte, zanjó: «Exactamente. Y, ya sabe, así fue durante mucho tiempo. Pero no, ginebra no».

Además, aseguró que Camilla abandonó el tabaco hace dos o tres décadas: «Dejó el tabaco hace 20 años. Hace 30, quizá». Y, aunque disfruta de un buen vino, siempre lo hace con moderación: «A ella le gusta el vino tinto, pero bebe muy moderadamente y con sensatez, ¿sabes? Quiero decir, literalmente, una copa y media», detalló en la conversación.

No es la primera vez que Parker Bowles, autor de varios libros de cocina y colaborador habitual en medios británicos, habla abiertamente de su madre. En el pódcast 'The Mid Point', de Gabby Logan, el pasado invierno, describió a Camilla simplemente como «una gran madre» y explicó cómo, con el paso de los años, la dinámica entre ellos se ha transformado: «A medida que se hacen mayores, aprecias lo que han hecho».

Hijo de Camilla y del brigadier Andrew Parker Bowles, Tom vivió una infancia bucólica en Bolehyde Manor, la casa de campo familiar en Wiltshire. Allí, según contó en otras ocasiones, la actual reina cocinaba platos sencillos, como pollo asado o un pastel de pastor. Un gusto por la sencillez que, al parecer, conserva intacto. «Si tuviera que cocinar para ella, probablemente sería algo así como un trozo de pescado. Ella realmente no come mucha carne. Sí, pescado. O quizás, ya sabes, prepara unos huevos revueltos buenísimos», compartió también con Thornton.

Alejado del glamour que rodea a menudo a la Familia Real, Tom ha hecho de la discreción su sello. En la misma conversación reveló que no ha heredado ninguna fortuna directa de su madre: «Lamentablemente, no hay fondo fiduciario», explicó, para acto seguido bromear: «Probablemente estaría muerto si tuviera uno».

Antes de convertirse en escritor y crítico gastronómico galardonado, Parker Bowles probó suerte en el mundo de las relaciones públicas, del que fue despedido a los pocos años. Aquel revés lo llevó a escribir sobre comida y a abrirse camino sin la ayuda del apellido. En 2024 publicó 'Cooking and the Crown', donde, por primera vez, aborda la tradición culinaria de la realeza británica, repasando recetas emblemáticas desde la época de la Reina Victoria.

Hoy, mientras la Reina Camilla ocupa un lugar destacado en la historia de la monarquía británica, Tom Parker Bowles sigue defendiendo la misma imagen privada de siempre: la de una madre sin excesos, fiel a una copa de vino tinto, que sigue siendo «la misma de siempre» cuando la familia se reúne a charlar alrededor de una mesa.