Salen a la luz nuevos datos sobre los presuntos malos tratos de Ortega Cano a Rocío Jurado
La semana pasada, Rocío Carrasco confesó que «en sus últimos años, mi madre fue una mujer desgraciada»
José Ortega Cano y Rocío Jurado
Fue la semana pasada cuando Rocío Carrasco reconoció que «en sus últimos años, mi madre fue una mujer desgraciada». Y el responsable, al parecer, no era otro que su marido, José Ortega Cano, con quien mantenía una relación marcada por discusiones e, ... incluso, por momentos duros: «La echó de Yerbabuena varias veces», confesó la hija de Rocío Jurado durante la emisión del programa 'En el nombre de Rocío'.
A pesar de que podía reconocer en el matrimonio de su madre lo que había vivido en el suyo, Rocío no quiso intervenir, aunque «todos lo sabían, pero callaban», reconoció.
El propio torero reconoció que tenían «mucho temperamento para enfadarnos y para amarnos». Pero fue más allá: «No me he portado perfecto con ella, porque la perfección no existe».
Esta semana, el espacio televisivo ha contado con la visita de Teresa Lázaro, la que fuera niñera de Gloria Camila y José Fernando Ortega. «Tenía la habitación cerrada con llave», ha dicho con rotundidad en relación a los presuntos malos tratos del torero hacia la cantante. «Se vio obligada a poner una cerradura en su dormitorio, porque había veces que estaba mejor dentro, cerradita con llave, que fuera», añadió la hija de 'la más grande' ante la atenta mirada de Jorge Javier Vázquez y el resto de colaboradores. Al parecer, la artista temía las reacciones que pudiera tener su marido «bajo los efectos del alcohol». «Había ocasiones en las que estaba mejor echando la llave por dentro. Lo he vivido y nadie me puede decir que no es verdad», recalcaba la hija de Pedro Carrasco.
Teresa Lázaro entró a trabajar para la familia de Ortega Cano el 14 de octubre en 2006 y desde entonces vivió numerosos momentos de la intimidad del matrimonio y sus hijos. A día de hoy, la exniñera reclama que el diestro le sigue debiendo dinero: «Tacaño como el puño de la hermandad, a mí me debe dinero. Me debe 300 euros de Montealto, de limpiar toda la finca y de todos los fines de semana», aseguró anoche.
Rocío Jurado y Ortega Cano
¿Porque se pillaba unas borracheras monumentales que acababan como acababan?, le preguntaban los colaboradores. «Porque había, como he dicho durante toda la docuserie, situaciones que no se debían de producir y se producían», contestaba ella sin entrar en demasiados detalles. «De ese día aquí no voy a hablar. Cuando me llegue la querella, entonces se lo digo», sentenció.
Ver comentarios