Pilar Jurado: «Les expliqué a mis perros que cantaba»

—Empezamos el año nuevo con Pilar Jurado y su familia perruna. ¿Cuántos canes tiene? 

—Tengo cinco labradores. Los padres (Groot y Shiva) que tienen cinco años, y sus tres hijos (Iris, Onix y Alba).

—Groot y Shiva fueron padres muy jóvenes.

—Sí. Eran muy jóvenes cuando se conocieron y Shiva se quedó embarazada en un descuido nuestro. Cuando le consulté a la veterinaria, me ofreció la posibilidad de ponerle la inyección del día después. Pero decidimos seguir adelante con el embarazo. El parto duró treinta horas y no me moví de su lado durante todo el tiempo. Groot tampoco se separó de ella. Tuvo ocho cachorros. Los hermanos viven con otras familias y seguimos en contacto para saber que están bien. Desde ese momento, Shiva cambió y se hizo adulta y empezó a ejercer de madre. Ella les ha educado y han creado sus propios códigos. Groot al principio no podía acercarse, pero luego también ha participado en la educación y la ayuda mucho.

—¿Cómo es el carácter de estos pequeños grandes canes?

—Groot, es activo y muy bueno. Shiva es la responsable, está pendiente de su pareja, de los cachorros y de mí. Onix fue el primero que nació y ella se asustó y tuve que tenerle durante una hora en mi regazo hasta que la madre la aceptó. Él es pura ternura. Alba es una detectora de la buena y la mala gente. Iris fue la más pequeña al nacer, pero es la mas lista. Aunque tienen un denominador común: son súper cariñosos todos. Necesitan estar siempre a tu lado y procuran el contacto físico, y yo les adoro a todos por igual. Aunque con Iris hay un vínculo más especial.

—Con estos cinco canes podría formar un pequeño coro. ¿Les gusta su música?

—Al principio, cuando eran pequeñitos se sorprendían y les tuve que explicar que yo cantaba (risas). Ahora ya no les llama la atención.

—¿En qué momento profesional se encuentra Pilar Jurado?

—Parece que todo empieza a normalizarse. Yo siempre digo que lo que hemos vivido ha sido tan complicado que no solo ha habido un cambio de actitudes momentáneas, sino que también ha cambiado el sistema. Todos los artistas hemos tenido que reconvertirnos y adaptarnos a lo que estaba pasando. Ahora se está recobrando el pulso y tengo un nuevo proyecto, una gira internacional. Es un homenaje a María Callas por el centenario de su nacimiento. Aprovecho para hacer su repertorio que también es el mío. Con ella tengo muchas concomitancias personales y profesionales y he creado un espectáculo precioso.

—Además la música a través de usted ha llegado a la UNED.

—Todo surgió a raíz de la llegada de la pandemia y nuestra vida sobre los escenarios se frenó en seco, pensé que era una oportunidad para poder poner en marcha esa formación de altísimo rendimiento. Varias universidades me habían sugerido que crease un Máster en Canto, pero por mi frenética actividad me impedía sentarme y crear algo tan especial y a lo que quería poner tanto amor. Estamos en el segundo curso y me siento muy orgullosa porque creo que era muy necesario.

—¿Cuál es el objetivo de este máster?

—Quiero enseñar a la gente a vivir de la música, a que sepan moverse en el business de la voz. Para que aprendan a crear un proyecto, financiarlo y buscar aliados... La autogestión es fundamental y hay que formar a la gente desde el conocimiento y la excelencia. En estos momentos, están abiertas las matrículas. Además, estamos creando una asociación sin ánimo de lucro para recibir ayudas y poder ayudar a la gente a que se forme. No todo el mundo tiene acceso a una carrera musical. ¡Feliz año a todos!

Una alimentación a su medida.

Cuidar el peso, la limpieza.

Darles los juguetes adecuados para su tamaño.