El nuevo susto de la Princesa Amalia de Holanda: perseguida presuntamente por una carretera de Bélgica

Por los alrededores de su casa en Ámsterdam, a principios de mes rondaron dos individuos que fueron señalados como presuntos «traficantes de cocaína» y cuyas intenciones parecieron sospechar que tendrían algo que ver con la perturbada tranquilidad de Amalia. Un suceso en el que mediaron los guardaespaldas de la Princesa y que terminó en un forcejeo con los individuos para tratar de expulsarlos de la zona.

Si entonces la Casa Real holandesa se quedó en «shock» tras conocer la noticia, el acontecimiento que ha tenido lugar este mismo mes seguro que no ha dejado a los monarcas nada tranquilos, pues puede significar que la seguridad de Amalia sigue en peligro. A principios de agosto, la policía de Amberes detuvo a varios sospechosos de seguir por carretera a la 'royal', pero todo fue una simple coincidencia.

Según informa el portal 'Het Parool', un coche que circulaba con varios ciudadanos holandeses dentro tomó el mismo camino en la carretera que cogió el coche en el que viajaba la Princesa heredera desde Ámsterdam. Inmediatamente al saberlo, los agentes inmovilizaron el vehículo en una de las principales calles de la ciudad, apuntaron a los sospechosos con sus armas y todos bajaron del vehículo con los brazos extendidos para proceder a su detención y traslado a una comisaría.

Tras una hora de interrogatorio, los individuos fueron puestos en libertad al confirmar que sólo se trataba de una casualidad y en realidad no perseguían intencionadamente a la Princesa. Entre los detenidos, destacaba un presentador y DJ famoso en Holanda, Serginio Piqué. Todos se dirigían al país vecino para pasar el fin de semana. «Mi cliente y sus amigos agradecerían enormemente que hubiera algún reconocimiento o reparación generosa por parte de la familia real. Al fin y al cabo, fueron sus servicios de seguridad los que avisaron a los belgas», ha asegurado el abogado de los acusados al medio.

Desde que el líder de la mafia que amenazó a Amalia se diese a la fuga, el objetivo principal de los guardaespaldas de la Princesa ha sido protegerla de cualquier movimiento sospechoso que pueda atentar contra ella y su vida. Amalia está muy comprometida con la agenda oficial, lo que implica que en cualquier punto alguien puede tener el objetivo de atacarla, obligando al equipo de seguridad a estar siempre alerta pase lo que pase. Aún con el temor de que pueda peligrar su vida, no deja de vivir momentos emocionantes con su familia como en los últimos Juegos Olímpicos 2024.