Nieves Álvarez: «Bill Saad se ha acreditado como periodista para tener una cita conmigo»
La empresaria nos habla de su nuevo proyecto profesional y del apoyo que ha recibido de su pareja para llevarlo a cabo
Nieves Álvarez dice estar encantada con Bill Saad y hace un llamamiento a la prensa
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Iniciar sesiónModelo y presentadora el nuevo paso de Nieves Álvarez es convertirse en empresaria de su propia línea de belleza. Sólo con el nombre de Nieves la madrileña se lanza a cumplir su sueño más ambicioso que se hace realidad gracias a su esfuerzo y ... al apoyo de su actual pareja, el libanés Bill Saad, que es quien más le ha animado.
—Ha convertido una habitación del hotel Ritz en su casa para presentar su 'bebé' como empresaria. ¿Necesita rodearse de sus recuerdos?
—Es el proyecto más importante de mi carrera ya que llevo cuatro años trabajándomelo y supone mi debut como empresaria. Esta bonita locura la he hecho sola y es que creo que en la vida es mejor intentar los sueños que quedarte con las ganas. Llevo mucho tiempo con la idea de crear mi propia línea de belleza y he querido involucrarme al máximo y no sólo ser imagen de marca. Por mi trabajo he vivido rodeada de dermatólogos, algo que aprendí desde mis primeros pasos como modelo, y siempre he acudido a ellos para tener un aspecto resplandeciente. Al principio por el acné, ahora por las manchas del sol… Después de la pandemia me lancé a cumplir este reto.
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—¿Cuánto ha invertido en este sueño?
—Soy la parte creativa y económica pero sin tener que hablar de dinero te diré que me he dejado toda mi experiencia y siempre dando prioridad al contenido de lo que hago. Con esta marca he abierto una ventana pero he cerrado muchas puertas porque ahora no podré colaborar con otras firmas.
—¿Qué va a cambiar en su vida convertirse en empresaria?
—Es algo que vivo con nervios, miedo e ilusión. Espero que la pasión que he puesto se sepa transmitir y que guste el resultado.
—¿Siente miedo a que la prejuzguen en esa industria al venir de otro sector?
—Supongo que la madurez y la experiencia me han dado la tranquilidad de saber que cuando me lanzo a algo pongo toda la seriedad y respeto con que cumplo mis objetivos. Así ha ocurrido en mi faceta televisiva como cuando hice diseño de moda infantil. Respeto y humildad es mi manera de hacer las cosas. Estoy respaldada por grandes expertos y supongo que habrá quien pueda prejuzgarme. Pero no me afecta. Todo el mundo opinará y sólo espero recibir crítica constructiva.
—¿Y no tenía bastante con su vida profesional?
—Soy puro nervio y tengo un espíritu aventurero. Mi imagen puede ser más tranquila, pero por dentro soy muy inquieta. Me gusta prepararme en cada reto porque me sirve para conocerme y aprender.
—¿Qué mayor elixir de belleza hay como el amor?
—Ninguno. Es el mejor activo que existe. Amo mi trabajo, mi familia, mi gente… Sin amor no podría hacer nada por eso me resulta esencial.
—Encima hoy tiene la suerte de tener un amor de pareja como es su novio Bill Saad.
—Estoy muy feliz en este momento. Hoy Bill ha tenido la genialidad de acreditarse como periodista para tener una cita conmigo y es que es así de divertido. El año pasado también me dio otra sorpresa para celebrar mis 30 años en la moda. Evidentemente la felicidad y el estar bien con una misma es básico para estar estupenda y sólo hay que añadirle constancia en cuidarse con rutina.
—¿Se puede decir que está en su mejor momento?
—En uno de los mejores porque estoy contenta con lo que hago y sigo con proyectos ambiciosos. Tengo una etapa de mucha serenidad y seguridad.
—¿Y eso como se consigue?
—Creo que es algo fruto del paso del tiempo y la experiencia. Por eso el tiempo es mi mejor aliado. No tengo la cara de los 20 años, pero mantengo su esencia y sumo la madurez y la alegría, las arrugas y sonrisas de la mujer que soy hoy.
—¿Llegará el momento de recurrir a la ciencia en forma de bisturí para aliarse con el tiempo?
—Estoy a favor de que se recurra a todo aquello que ayude a sentirse bien. Me gustan ver las caras que saben envejecer, pero para eso también está la ciencia siempre que se haga de forma natural. El otro día vi a Sharon Stone y está fantástica. Quiero verme bien aunque hoy lo que realmente me parece importante es la salud.
—¿Casarse con Bill Saad puede ser su próxima aventura?
—No es algo que descarte, pero no figura en mi lista de prioridades. No lo necesito.
—¿No le gustaría tener ese compromiso?
—Los compromisos se hacen cada día y no me parece que casarte suponga un compromiso de por vida. Lo más importante es tener respeto y admiración hacia la persona que está a tu lado.
—Sus tres hijos viven al margen de su popularidad. No están ni en redes sociales.
—No les interesa para nada la fama ni estar en el objetivo. Por suerte quieren mantenerse al margen y tampoco usan las redes de forma pública.
—¿Y qué le enamoró de Bill Saad?
—Él. Tiene una personalidad y carisma arrollador. Nos conocimos en una cena donde no fui muy simpática y un año después volvimos a coincidir en la misma cena de cumpleaños y allí reconozco que estuve más agradable. Así empezó todo. Vive en Madrid pero viaja mucho y te aseguro que ha sido de los que más me ha animado a lanzar este proyecto. Él y mis íntimos amigos que me han aconsejado y arropado.
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