El negocio del mundo del espectáculo en el que ha invertido Albert Rivera

Pero esta no es la única novedad en su currículum, el abogado es un hombre inquieto y así lo ha demostrado desde que dejó la política en el año 2019. En aquel momento hizo lo que se esperaba que hiciera, retomar su trabajo como letrado donde lo había dejado cuando se dio por completo a la aventura que fue la irrupción de Ciudadanos en el panorama político español. Y desde entonces prácticamente todo lo que ha hecho tiene que ver con la abogacía o las inversiones, excepto algo que es, cuanto menos, sorprendente: Rivera ha invertido en una asociación de interés económico dedicada al espectáculo.

Se llama Haciendo Malabares AIE y su objeto social es «la producción, realización, distribución y comercialización tanto en el territorio nacional como en el extranjero de espectáculos en vivo de artes escénicas y musicales», de hecho es una de las sociedades que en la actualidad se encarga de la venta de entradas del espectáculo Rock Circus de Productores de Sonrisas. Una asociación de interés económico es un tipo de empresa en el que varias personas interesadas en un proyecto en concreto invierten juntas para beneficiarse unas a otras, y generalmente se da de alta una entidad para cada uno de los trabajos que se quieren realizar.

Es sin duda llamativo que Albert Rivera haya decidido invertir en algo así en este 2024, justo cuando su vida pasa por su momento más discreto desde que se presentase al frente de la formación naranja. Pues, además de haber vivido junto a él sus aventuras y desventuras en el mundo político, también fue muy comentada su vida privada tras su ruptura con la azafata Beatriz Tajuelo (45 años), con la que compartió cinco años, para iniciar una relación con la cantante Malú (42), con la que tuvo a su segunda hija, Lucía, el 6 de junio de 2020. Aunque sin duda lo que más interés generó en el papel cuché fue el fin de esta relación sentimental.

Después de esto, el abogado se ha mantenido en un perfil muy bajo y, aunque ha protagonizado algunas fotos con su actual pareja, la influencer Carla Cotterli, lo cierto es que todos ellos han sido robados, pues la pareja por el momento no se ha dejado ver juntos en ningún evento público.

Por ello, parecía cortado todo lazo con el mundo de los focos y las cámaras, pero con su última inversión, resulta evidente que no es así y que la parte quizá más cultural de todo ello, le sigue interesando. Esta incursión la ha hecho a través de Aldaluri S. L., empresa con la que comenzó cuando aún mantenía una relación con la cantante y cuyo nombre corresponde a las dos primeras letras de su nombre, las de sus dos hijas, Daniela y Lucía, y el apellido de los tres. Hasta ahora se creía que no mantenía actividad porque nunca ha presentado cuentas, pero ya hemos visto que lo cierto es que si la tiene.

Y no es el único negocio en el que se encuentra inmerso Albert Rivera. A los pocos meses también dio de alta Meeting Lawyers S. L., un servicio de asesoramiento jurídico con unas condiciones muy innovadoras y particulares que comenzó después de conocer a sus socios y que le presentaran el proyecto en el bufete donde él trabajaba, Martínez-Echevarría Abogados, y con los que se aventuró a iniciar esta aventura.

Y el más reciente, en marzo de 2022, comenzó con el que hasta ahora se considera su proyecto más serio y ambicioso, RV Estrategia S. L., empresa dedicada a «la actuación, como mediadora en la prestación de servicios de carácter jurídico y legal. La prestación de servicios de asesoría y consultoría a particulares, empresas y organismos de toda clase, en aspectos jurídicos, fiscales, laborales, económicos y sociales», es administrador solidario junto a su socio y amigo José Manuel Villegas.

Esta sociedad desde la que se ha asociado con el Club Raheem, algo que anunciaron la última semana de mayo en su perfil de Linkedin con el siguiente comunicado: «Desde RV nos complace anunciar que hemos unido fuerzas con el Club Raheem GL mediante un acuerdo estratégico cuyo objetivo es potenciar el crecimiento mutuo y enriquecer la calidad de los servicios que prestamos a nuestros clientes y socios respectivamente».

En definitiva, después de un año complicado, porque en el 2023 además de su ruptura con Malú, Albert vivió la inesperada muerte de su padre, ahora parece muy centrado en el trabajo, en diversificar sus fuentes de ingresos y en abrir nuevos horizontes, lo que sin duda está logrando