Lara Dibildos se abre en canal: «Tuve anorexia y bulimia»
La actriz, que acaba de estrenar obra de teatro, habla de su novio, Carlos Maturana, de su madre, Laura Valenzuela, y del cáncer que le diagnosticaron cuanto tenía 19 años
La inédita confesión de Lara Dibildos: «Es el hombre de mi vida»
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Lara Dibildos está en uno de sus mejores momentos. Tanto en el ámbito profesional como personal. Desde hace unos meses, la hija de Laura Valenzuela comparte sus días con Carlos Maturana, con se aventuró a vivir un noviazgo tras haber echado el freno ... por su diferencia de edad. «Nos llevamos 14 años. Empezamos como amigos, quedamos muchísimas veces, íbamos mucho al teatro. Yo le veía y pensaba que era muy joven, pero, al final, creo que nos hemos encontrado en el momento adecuado los dos. Me tiré a la piscina y que sea lo que Dios quiera», confiesa a la revista 'Lecturas'. Y, por el momento, la cosa va viento en popa.
A sus 53 años, ha decidido «vivir el día a día porque esas cosas que estamos viviendo no me las va a quitar nadie. Ojalá que dure y que dure muchísimo tiempo». Para Lara Dibildos, Maturana «tiene algo especial, tiene mucha personalidad. Es tímido, pero, cuando se suelta, tiene mucho sentido del humor». Eso sí, si algo destaca sobre el resto es la buena sintonía que tiene con sus hijos. «Ha conocido a los dos. Con el pequeño, que es con quien vivo, se lleva muy bien», desliza al citado medio. Además, el hecho de que ella viva con su vástago motiva que él suela ir más a su casa que a la inversa: «Viene más él».
La presentadora de televisión, que acaba de estrenar obra de teatro, está decidida a seguir con la escritura del libro que comenzó sobre el cáncer: «Me falta el final. Ha sido un tsunami para mí porque es volver atrás en el tiempo». El motivo por el que decidió pararlo durante un tiempo fue por su madre: «Fue cuando empezó a estar mal mal y no me sentía con ganas porque todos los recuerdos eran con ella. Ha pasado un año y medio y todavía no he sido capaz de ponerme a ello». Y confiesa que sigue poniéndose nerviosa cuando se hace las revisiones rutinarias: «No lo puedes evitar porque te vienen a la memoria tantos momentos duros que has pasado...».
Problemas alimentarios
A Lara Dibildos le diagnosticaron un cáncer cuando tenía 19 años. Y la enfermedad «me cambió mi forma de vida, me hizo madurar muchísimo, cambiar la forma de ver las cosas, el ser tan disfrutona como soy es mucho por todo aquello que pasé». Aunque recuerda los momentos más delicados y por los que tuvo que recurrir a profesionales: «Tuve problemas alimentarios, de anorexia y bulimia». Y pese a haber «tenido recaídas a lo largo de mi vida, hace muchísimos años que no tengo ninguna». También le recomendaron que no se pesara. A raíz de entonces, «no me peso nunca. No tengo básculas en casa».
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