Lara Álvarez: «Ahora no es el momento, pero no estoy cerrada a la maternidad ni a vestirme de blanco»

Esta semana, la Galería de Arte David Bardía acogió la presentación de 'Essential Love', la nueva campaña de la marca española de calzado Carmela con la que Álvarez repite siendo su modelo. «Feliz de ser embajadora de Carmela por quinto año consecutivo», enamorada y con varios trabajos sobre la mesa, con el mensaje de la colección se siente muy identificada. «Significa que disfrutes de la vida, de los momentos y la moda pero sobre todo disfrutes de ti mismo, que a veces se nos olvida nuestra esencia y es fundamental quererse, disfrutarse, conocerse y vivirse», expresa quien también reconoce que trabaja en profundidad en ella. «Yo llevo en el mundo del autoconocimiento mucho tiempo y me encanta. Creo que es un camino inagotable y disfruto muchísimo cada día más».

Para Lara, «es importante transmitir esa sensación de que una mujer puede ser 'cool' y seguir la moda, pero sentirse cómoda». Así, unos zapatos cómodos cambian incluso su carácter y actitud ante la vida. Menos 'cool' considera el hecho de que no falta en su bolso «una bolsita de pienso porque salgo con los perretes a todos lados», aunque prefiere añadir que no sale de casa sin un cacao para los labios. Entre piezas de arte y complementos, la sonrisa con la que evalúa Lara el «giro potente» que ha dado en su vida denota que no se arrepiente de la significativa decisión que tomó hace casi un año y que comunicó en sus redes sociales. La presentadora dejaba Mediaset para embarcarse en un nuevo camino profesional que ya da sus frutos. Mucho tiempo para ella, «la capacidad de poder elegir qué dirección tomar en cada momento o proyectos propios y profesionales muy ilusionantes» ha obtenido en estos meses.

Después de 'Supervivientes' y otros programas en Telecinco con los que se despidió de la cadena, Lara Álvarez aterrizaba en Televisión Española con un formato de entretenimiento entre manos que ya ha grabado y espera ansiosa que vea la luz. «Tengo muchas ganas de tener el 'feedback' del espectador porque disfrutamos mucho haciendo 'La Conexión', que es un cambio de registro y una manera diferente de presentarme a la audiencia», ha explicado. Con distancia entiende que necesitaba probarse en algo así. «Al final no dejó de ser una apuesta muy personal y de riesgo dejar Mediaset. Era un momento de evolución, que va mandando en mi vida. Es reconfortante ver que hay apoyo y posibilidades fuera. Ahora puedo decir que era necesario y estoy muy contenta», expresa quien deja claro que en el presente su relación con la cadena sigue siendo positiva.

Con la habilidad de «adaptarse rápidamente a las circunstancias», además del programa cultural con el que Lara pasa a formar parte de TVE, cuenta que está «empezando con mi propia agencia de comunicación con la que estamos instruyendo a directivos y ejecutivos a aprender a hablar al público con menos nervios gracias a la experiencia que hemos recabado con el tiempo». Aunque sea una de sus facetas más desconocidas, Álvarez lleva experimentando con la docencia junto a los cursos Radiofonics tres años. «Siempre me ha gustado el contacto directo y para mí ha sido fundamental en mi carrera tener esa perspectiva que me han dado grandes profesionales como Nieves Herrero o Jesús Hermida, que han sido el faro de mis decisiones y valores como periodista», confiesa quien transmite muy involucrada los suyos propios a los alumnos a los que enseña.

De los jóvenes con los que comparte consejos de comunicación ha aprendido de su visión del mundo, lo que le abre «la mente de cómo es importante en la evolución adaptarte al tiempo», una idea que en su vida sentimental lleva a la práctica en el presente. Familiar desde siempre, se siente muy conectada a su hermano, con quien tiene «un apego sano porque estamos sin necesidad de estar presentes todos los días y da mucha tranquilidad», a sus perros por y para los que vive, y sobre todo a ella misma, «a la sensación de plenitud y de agradecimiento de estar abierta a las nuevas oportunidades». Por otro lado, también reconoce que entre sus mayores defectos destacan ser impaciente y que su cabeza le va «tremendamente rápido», y sólo boxeando, con el deporte o sumergiéndose en el agua logra controlarla.

Abierta en los últimos meses ha compartir con la prensa su deseo de vivir un amor de verdad después de varias relaciones fallidas, Lara rompía en diciembre su máxima respecto a su vida privada y compartía unas románticas imágenes con Perico Durán, con quien se reencontraba después de 13 años para escribir un nuevo capítulo en su historia. «Tener pareja es una cosa que intento normalizar pero hablar de ello no me hace sentir muy cómoda. Al final cuando salen unas fotografías y es una cosa pública, negarlo es absurdo. A veces funciona y a veces no, pero en este momento estoy muy bien», se sincera dejando claro que su relación de respeto mutuo con la prensa le permite no dar detalles de su relación mientras la vive sin sentirse presionada.

El futuro, a sus 38 años, tampoco lo mira desde la preocupación por el paso del tiempo y por construir deprisa un proyecto familiar en común que incluya estrenarse en la maternidad. «En mi cabeza es importante tener la independencia para poder escoger de manera libre el momento sin presión. Las mujeres jugamos con un reloj biológico que no es fácil. Hace tiempo congelé los óvulos y ha sido una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida, sobre todo por no tener esa sensación de que no con cualquiera, no en cualquier momento, no de cualquier forma porque el tiempo pase», confiesa sincera. «Ahora mismo para mí no es el momento porque estoy plena de muchas cosas y quiero disfrutarlas, pero no estoy cerrada a la maternidad. A vestirme de blanco tampoco estoy cerrada. Estoy abierta a sentir las oportunidades en cada momento», reconoce que entre estas hay proyectos que le ilusionan y propuestas como convertirse en concursante de 'realities' con los que considera que es pronto involucrarse mientras no pueda hacerlo al cien por cien.