Quién es Lady Victoria, la mujer de Keir Starmer: su edad, su profesión y sus orígenes judíos

Nacida en 1963 -tiene 61 años- con el nombre de Victoria Alexander, proviene de una familia judía, lo que añade una capa de diversidad cultural a su historia personal.

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Abogada especializada en derecho laboral y de empleo, Victoria ha trabajado en casos complejos que reflejan su compromiso con la justicia y los derechos de los trabajadores.

Su carrera en el ámbito legal es un testimonio de su dedicación y profesionalismo, características que también ha volcado en su rol de madre y esposa.

Victoria y Keir Starmer se conocieron en el ámbito profesional y su relación floreció rápidamente. Ambos coincidieron en un caso que les llevó a una cita en el pub Lord Stanley de Camden Park Road.

Residen Kentish Town, en el norte de Londres con sus dos hijos (de 15 y 13 años), quienes han sido criados en un ambiente que valora la educación, la justicia social y la integridad, según han comentado en algunas entrevistas.

A pesar de su inclinación por la privacidad, Victoria ha sido un pilar de apoyo esencial para Keir. Su comprensión de la vida pública y la presión que conlleva ha permitido a Keir navegar el complicado mundo de la política con un respaldo constante y fiable.

Amigos cercanos de la pareja describen a Victoria como una persona inteligente y discreta, que prefiere contribuir desde las sombras, evitando los focos mediáticos.

El papel de Victoria en la vida de Keir no se limita solo al ámbito personal. Ha sido una consejera y una fuerza estabilizadora, especialmente durante los momentos críticos de su carrera política.

Su experiencia en derecho laboral le ha brindado una perspectiva valiosa en la formulación de políticas laborales del Partido Laborista, aunque siempre desde un segundo plano.

Con las encuestas favoreciendo a Keir Starmer para convertirse en el próximo primer ministro del Reino Unido, Victoria se prepara para un rol aún más visible y significativo en el número 10 de Downing Street de cumplirse lo que pronostican los sondeos.

Aunque su inclinación será seguir siendo una figura de bajo perfil, su impacto en la vida pública de Keir y en su potencial gobierno no puede ser subestimado. Su equilibrio entre la vida profesional y familiar, junto con su firme apoyo a los principios y objetivos de su esposo, continúa siendo una parte integral del éxito de Keir Starmer en el panorama político británico.