El lado más personal de Melania Trump: su edad, la relación con su hijo y sus planes de futuro si Trump gana las elecciones

A finales de la década de 1980, Melania se mudó a Milán y luego a París, donde comenzó a consolidar su carrera en el mundo del modelaje. En 1996, se trasladó a Nueva York, donde su carrera alcanzó su punto álgido. Se convirtió rápidamente en una figura frecuente en campañas publicitarias, portadas de revistas y desfiles de alta costura, trabajando con algunas de las agencias más prestigiosas y colaborando con diseñadores de renombre internacional.

Su vida cambió en 1998, cuando conoció a Donald Trump en una fiesta en Nueva York, a través de un amigo en común. Aunque Donald Trump estaba entonces casado con su segunda esposa, Marla Maples, la atracción entre ambos fue inmediata y terminó con una boda en la mansión que Trump posee Palm Beach, en 2005. Con esa boda Melania pasaría a ser la esposa de uno de los hombres más poderosos del mundo.

Cuando Donald Trump ganó las elecciones presidenciales de 2016, Melania pasó a convertirse en la primera dama de Estados Unidos, pero siempre optó por mantener un perfil bajo. Fuentes cercanas a su entorno aseguraron que a la exprimera dama no le interesaba lo más mínimo la política. De hecho, Melania fue grabada quejándose de tener que encargarse de la decoración navideña de la residencia presidencial y retrasó seis meses su mudanza a Washington poniendo como excusa el calendario escolar de su hijo Barron.

Uno de los aspectos más significativos de la vida de Melania es su relación con su hijo, Barron Trump, quien acaba de cumplir 18 años. Durante la presidencia de Donald Trump, Melania dejó claro que su prioridad siempre sería la crianza de Barron. Es por esto que nunca se planteó tener más hijos: «Yo sé lo ocupado que él está... y yo estoy a cargo de todo. Así que es por eso. Estoy completamente bien con uno porque tenemos una vida vida muy ocupada«, explicaba en una entrevista en el programa Fox & Friends de Fox New.

Melania es una mujer muy selectiva con respecto a sus amistades y que prefiere mantener una vida privada lejos de las cámaras. Aunque se habla continuamente sobre una crisis matrimonial, lo cierto es que su relación con Donald Trump es sólida.

Tras su salida de la Casa Blanca en 2021, Melania y Donald Trump se mudaron a su residencia en Mar-a-Lago en Florida. Fuentes de su entorno aseguran que a la exprimera dama no le interesaba la vida política de su marido y que lo que a ella le gusta es vivir su vida de lujos entre Palm Beach y Nueva York. La pregunta que ahora todo el mundo se haces es: ¿Qué pasará con Melania ahora que Trump ha ganado las elecciones?. Muchos apuntan a que en los planes de Melania no está volver a vivir en la Casa Blanca.