El lado más personal de Lamine Yamal: su edad, sus orígenes familiares y su vida en el colegio

La plantilla actual tiene las caras totalmente renovadas respecto a ese equipo que tocó el cielo en Suráfrica pero no por eso hay menos ilusión. El sólido equipo configurado por el seleccionador nacional, Luis de la Fuente, cuenta con pesos pesados y jóvenes promesas que hacen soñar en conseguir, de nuevo, una gran competición.

Uno de ellos es Lamine Yamal. El jovencísimo 'crack' del Barça, a quien muchos ven como uno de los grandes talentos de esta Eurocopa e incluso comparan con Leo Messi, atesora, de base, uno de los récords de esta edición, el de ser el joven más joven de todo el torneo: con suerte, el extremo azulgrana soplará las velas de su 17 cumpleaños el próximo 13 de julio, un día antes de la gran final. A pesar de su juventud, se prevé que sea uno de los indiscutibles en el equipo de De la Fuente y uno de los nombres de la Eurocopa.

Lamine Yamal Nasraoui y Ebana nació en Esplugas de Llobregat (Barcelona) en 2007, tres años antes de que España consiguiera su primer Mundial. Su padre, Mounir, nació en Marruecos y su madre, Fátima, en Guinea Ecuatorial y ha pasado toda su vida viviendo primero en Mataró luego en Granollers, ambos municipios del entorno metropolitano de Barcelona.

De aquí a que muchos se pregunten antes que nada en sus orígenes, que él tiene muy claros. Su vida está en el barrio de Rocafonda, en Mataró, que siempre acaba recordando tras marcar un gol: suele dibujar un 304 con sus dedos, en alusión al código postal de esta barriada, que hace años recibió a mucha inmigración y en la que todavía ahora vive buena parte de su familia, y para hacer un guiño a sus colegas con los que empezó a jugar a fútbol.

Su vida está ligada al fútbol desde muy joven. Con siete años llegó a La Masía procedente de un club de La Roca del Vallès. Y allí continuó su progresión asombrosa gracias a su juego: hace poco más de un año, en abril de 2023, debutó con el primer equipo del Barça. Tenía solo 15 años, 9 meses y 16 días, con lo que con ese logro ya empezó a hacer historia. Ahora sigue triunfando, aunque todavía lo tienen que llevar a la ciudad deportiva, puesto que todavía no tiene edad para conducir.

Su juventud es visible a simple vista. Sus 'brackets', típicos entre los adolescentes de su edad, lo delatan, así como una de sus ocupaciones estos días en el hotel de la selección: Lamine está cursando 4º de ESO, ahora de momento online, y la Eurocopa le coincide con la época de exámenes finales de curso. «Espero que no me suspendan...», ironizó recientemente en una entrevista.