Kate Middleton saca fuerzas por un motivo muy especial

Al parecer, ya es tradición que el Palacio de Kensington publique fotografías familiares en momentos destacados realizadas por la propia Kate Middleton, una entusiasta fotógrafa aficionada, para conmemorar cumpleaños y otras ocasiones importantes. La última vez con motivo del cumpleaños de su hijo pequeño. «¡Feliz sexto cumpleaños, Príncipe Luis! Gracias por todos vuestros buenos deseos hoy», escribieron en la cuenta oficial junto con una imagen que mostraba un primer plano del pequeño muy sonriente y apoyado sobre los antebrazos. Una fotografía que, tal y como aseguraron fuentes oficiales, había sido tomada días antes en el Palacio de Windsor y no había sido editada. Esta fotografía tomó especial relevancia al ser la primera instantánea hecha y compartida por la Princesa después del revuelo generado por la publicada y manipulada con Photoshop.

A finales del pasado mes de marzo, el Palacio de Kensington publicó una imagen de la Princesa de Gales, la primera desde que se sometió a una cirugía abdominal en enero, junto a sus tres hijos, con motivo de la celebración del día de la madre en Reino Unido. En ella, Kate y los tres menores aparecen sonrientes en una fotografía que según palacio fue tomada por el Príncipe Guillermo. La foto estaba acompañada del texto: «Gracias por sus buenos deseos y apoyo continuo en los últimos dos meses. Les deseo un Feliz Día de la Madre. C».

Pocas horas más tarde, algunas de las grandes agencias de noticias como Reuters, Associated Press o AFP emitieron un aviso de retirada de la imagen, es decir, la prohibición de publicar una imagen previamente distribuida, ya que, según un comunicado de AP, «tras una inspección más detallada, parece que la fuente ha manipulado la imagen», algo que no está permitido según los estándares de uso de las agencias. Los usuarios de las redes sociales se apresuraron a señalar los errores en la imagen, que incluían una «inconsistencia en la alineación de la mano izquierda de la Princesa Carlota», un dedo más corto que el otro en la mano del Príncipe Luis, la cremallera del abrigo de Kate y la desaparición de su anillo de bodas», entre otros.

Ante esta medida, desde Palacio decidieron en un primer momento guardar silencio y no responder a las preguntas de los medios locales e internacionales que pedían claridad sobre lo sucedido. Lo que propició que los comentaristas reales pusiesen el grito en el cielo, advirtiendo que esto sólo servía para alimentar los rumores sobre la salud de la futura reina y su proceso de recuperación.

Una tormenta mediática que terminó con la publicación de un vídeo protagonizado por la propia Kate Middelton en la que confesaba que padecía cáncer y que había comenzado un tratamiento de quimioterapia. Por su parte, el heredero al trono, reanudó sus funciones oficiales poco tiempo más tarde para suplir el hueco que ha dejado su padre, Carlos III por haber sido diagnosticado el pasado mes de febrero también cáncer. Hasta el momento al monarca se le ha podido ver en contadas ocasiones mientras que la Princesa de Gales continúa recuperándose en la más estricta intimidad y sólo volverá al foco mediático cuando su equipo médico le diga que se encuentra lo suficientemente bien como para poder hacerlo.